Madrid cabe en un hotel, y Grupotel Mayorazgo, el nuevo establecimiento de la cadena Grupotel Hotels & Resorts ubicado en plena Gran Vía, invita a disfrutar en cada ocasión de una experiencia aún más inmersivas de la ciudad en sus más de 200 habitaciones temáticas y espacios únicos inspiradas en la esencia de la capital. A través de su decoración, gastronomía, ecos musicales de chotis o de La Movida madrileña, este hotel temático ofrece una experiencia para vivir y descubrir Madrid con los cinco sentidos, tanto en el ámbito de sus tradiciones más arraigadas como a la hora de disfrutar del espíritu de gran urbe moderna y cosmopolita que define a la ciudad hoy en día.
Ubicado en esquina con la siempre transitada Gran Vía, su fachada engalanada con un imponente mantón de Manila es un guiño a las chulapas y a los balcones que se visten de fiesta en las celebraciones madrileñas. En su interior, cada habitación es un homenaje a la ciudad en su totalidad, desde su cultura, sus parajes, sus celebridades y refranes. Algunas llevan nombres de espacios icónicos e imprescindibles, como La del Retiro, La del Chotis, La de la Gran Vía, La de Plácido Domingo, La de D.Enrique Tierno Galván, La de la Plaza de Colón, La de las Cortes, La de Navacerrada o La del Hayedo de Montejo… son solo algunos ejemplos.
Otras rinden tributo a historias menos conocidas, como La de las Descalzas Reales, inspirada en el monasterio escondido en pleno centro de Madrid, o La de los Alfileres de San Antonio, que evoca esa tradición según la cual, cada 13 de junio, modistillas y chulapos sumergían alfileres en agua bendita para conocer su suerte en el amor. También destacan La de la Chata, la cual rinde homenaje a Isabel de Borbón y Borbón, más conocida como La Chata, una de las infantas más queridas y emblemáticas de Madrid. Apasionada de la ciudad y sus costumbres, gran defensora de las tradiciones populares y una figura cercana al pueblo, ganándose el cariño de los madrileños. Su habitación en Grupotel Mayorazgo está decorada con elementos que evocan su carácter y amor por Madrid, a la par que se reconoce el dulce creado en su honor, Las Chatitas. Por otro lado, La de Cine Doré transporta a la época dorada del séptimo arte en Madrid, rindiendo tributo a esta legendaria sala inaugurada en 1912 y que, con su icónica fachada de inspiración modernista, sigue siendo un templo para los cinéfilos. La del Bocata de Calamares, espectacular recreación en 3D de uno de esos icónicos bocadillos tan populares para madrileños y visitantes y La del Cocido Madrileño, en consonancia con ámbitos gastronómicos.
Pero la experiencia madrileña de Grupotel Mayorazgo no se limita a sus habitaciones. En Gastrovía 61, su restaurante de cocina de autor, la gastronomía castiza se reinventa sin perder su esencia. Desde los tradicionales huevos rotos a nuestra bola hasta su afamado Cocido Madrileño, servido a los tres vuelcos que dicta la tradición, cada plato es un homenaje a los sabores más auténticos de la ciudad en perfecta conjunción con las técnicas vanguardistas y sin olvidar esas tendencias “healthy” cada vez más demandadas por el comensal. La experiencia se completa con una selección de vinos D.O. Madrid junto a otras variedades de reconocido prestigio internacional con aperitivos castizos, un servicio en el que los camareros lucen con simpatí castiza chalecos de chulapo y clavel en la solapa y una carta repleta de términos mazo madrileños, acompañado siempre de un glosario en el que buscar las referencias e historia de los términos, reforzando la identidad madrileña del hotel.
Los espacios comunes de Grupotel Mayorazgo continúan este viaje inmersivo. El "Bar Retiro", inspirado y decorado como el famoso parque, con puertas de forja, espacios repletos de verde e incluso un pequeño estanque. O el reservado del restaurante Gastrovía 61, La Verbena, rinde tributo a oficios tradicionales, bautizando cada una de sus mesas con referencias a Churreros, Castañeras, Barquilleros … El desayunador La Pradera, espacio icónico de la ciudad, decorado en esta ocasión con imágenes gran formato de los principales parques urbanos. O esas fotografías históricas que iluminan con nostalgia e historia múltiples rincones de las instalaciones.
En Grupotel Mayorazgo, cada detalle está pensado para que los visitantes no solo disfruten su estancia en Madrid, sino que continúen descubriendo y disfrutando la ciudad al finalizar sus visitas. Este hotel hace cada ocasión una experiencia única donde tradición y modernidad se dan cita en pleno centro de la ciudad. Porque en Grupotel Mayorazgo, Madrid no solo se visita, se siente.