La campaña “Cuenta con los lácteos europeos” promueve una iniciativa para poner en valor el papel de estos alimentos en la cocina de aprovechamiento
Con la cercanía de las celebraciones navideñas, muchas familias tienden a comprar por encima de sus necesidades bajo la idea de que “más vale que sobre”, una costumbre que alimenta las cifras de desperdicio alimentario y su impacto climático.
La Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Alimentación (FAO) estima que en el mundo se desperdicia el 30 % de los alimentos. En España, según datos oficiales, esta cantidad supera los 1.125 millones de kilos al año, acaparando los hogares el 97,5 % del total.
Para cambiar esta tendencia, la Organización Interprofesional Láctea (InLac), en el marco de la campaña cofinanciada por la UE “Cuenta con los lácteos europeos”, anima a adoptar la cocina de desperdicio cero: planificar, ajustar raciones y dar una segunda vida a los alimentos antes de que terminen en la basura, por responsabilidad con el Planeta y respeto a la soberanía alimentaria.
Durante estas fiestas, se desplegará una acción de concienciación en televisión y redes sociales para aprovechar al máximo lo que compramos y cocinamos. “La clave está en anticipar y medir: pensar el menú con realismo, calcular cantidades y reservar ideas para el día después. Leche, yogur y queso son aliados versátiles que facilitan convertir restos en platos equilibrados y sabrosos”, señalan desde InLac. “Cada gesto cuenta: transformar un sobrante en receta evita residuos, reduce costes en el hogar y reconoce el trabajo de toda la cadena láctea”, añaden.
El presidente de InLac, Javier Roza, subraya el impacto de nuestras decisiones diarias: “Detrás de cada alimento desperdiciado hay agua, energía y el esfuerzo de muchas personas. Estas Navidades, apostemos por el aprovechamiento inteligente: con lácteos europeos es sencillo complementar, enriquecer y revalorizar lo que queda en la nevera. Es una manera de cuidar el bolsillo y el entorno”.
Con motivo de esta iniciativa “Desperdicio 0”, se ha contado con la colaboración del reconocido artista 72kilos, prescriptor de la campaña, para crear una nueva gráfica que refuerza el compromiso del sector con la sostenibilidad. Esta pieza, diseñada para Bélgica y España, transmite de forma sencilla y emotiva la importancia de reducir el desperdicio alimentario, más en estas fechas. La campaña propone recuperar las recetas que han pasado de generación en generación y rendir un homenaje emocional a quienes más sabían de aprovecharlo todo en la cocina: los abuelos.
El desperdicio de alimentos es un reto de primer orden, tanto por la pérdida de comida como por la huella ambiental asociada. Hogares y profesionales de hostelería avanzan hacia el “supra-reciclaje” culinario: reutilizar excedentes para crear elaboraciones de mayor valor, por ahorro y compromiso ambiental. Desde InLac recuerdan que los lácteos son pura cocina de aprovechamiento: porque su desperdicio potencial es mínimo; y porque su gran versatilidad permite combinarlos con casi cualquier ingrediente de la despensa o la nevera para lograr platos saludables en minutos.
“Cada vez que eliges un lácteo para completar o transformar un resto, estás contribuyendo a reducir el desperdicio”, concluyen los responsables de la campaña “Cuenta con los lácteos europeos.





