Tras el éxito de sus dos primeros locales y más de 100.000 tartas vendidas en 2024, la marca da un paso más con la apertura de su tercer espacio en Las Salesas, reafirmando su espíritu boutique y su posición como referente en Madrid. El nuevo local cuenta con 160 metros cuadrados distribuidos en dos plantas y ha sido diseñado por Right Design Agency. Con tonos crema, luz natural y un diseño modular, está concebido no solo como punto de venta sino también como lugar de encuentro.
En apenas cuatro años, Luna & Wanda ha pasado de ser un proyecto personal nacido en una cocina doméstica durante el confinamiento a convertirse en un verdadero fenómeno gastronómico en Madrid. Ahora, la marca liderada por Sergio Arjona da un paso más con la apertura de su tercer local ubicado en el barrio de Las Salesas, un espacio que mantiene el espíritu boutique de la firma y al mismo tiempo abre nuevas posibilidades para seguir construyendo comunidad entorno a una de las tartas de queso más famosas.
El tercer local deLuna & Wanda se ubica en uno de los barrios más de moda y sofisticados deMadrid: Las Salesas. Con una superficie total de 160 metros cuadrados repartidos en dos plantas —120 m² en la planta principal y 40 m² en la inferior—, este nuevo espacio no solo está concebido como punto de venta, sino también como lugar de encuentro, disfrute y experiencias alrededor de la repostería. Por ejemplo, a partir del mes de octubre se ofrecerán actividades como catas de tartas de queso para grupos con diferentes vinos y tartas que irán cambiando en función de diferentes colaboraciones que irá haciendo el obrador con otras marcas. El proyecto lleva la firma de Right Design Agency, el estudio de arquitectura e interiorismo que ya ha trabajado con Luna & Wanda en sus dos anteriores aperturas. En esta ocasión, el reto fue dar forma a un concepto diferente en un plazo récord de tan solo 30 días. El resultado es un espacio que mantiene muchos elementos originales del inmueble, al tiempo que apuesta por un aire renovado: tonos crema en paredes y suelos, una atmósfera cálida y sofisticada, y un diseño modular que favorece la versatilidad. "La apertura en este barrio, que se ha convertido en un auténtico referente de creatividad y tendencias, no es casualidad. Queremos que nuestras tartas de queso se conviertan en parte de esa energía, ofreciendo a vecinos y visitantes un rincón donde disfrutar de un momento dulce y compartir este lugar tan especial”, cuenta el fundador de Luna & Wanda, Sergio Arjona.
El diseño como seña de identidad
Desde sus inicios, Luna & Wanda ha hecho del diseño un pilar fundamental de su identidad. Los locales de Ferraz y Ponzano fueron concebidos como espacios en los que la estética jugaba un papel importante a través de tonos cálidos, materiales nobles y un mobiliario cuidadosamente seleccionado que incluye piezas de marcas emblemáticas como Cassina, Cappellini o Santa & Cole, así como iconos del diseño como la lámpara Taliesin de Frank Lloyd Wright. En todos sus espacios, la marca ha buscado crear experiencias acogedoras y sofisticadas, en las que cada detalle, desde el interiorismo hasta el packaging, forma parte de un mismo relato. El nuevo local de Las Salesas continúa esa misma línea, pero con un carácter propio. Más luminoso, versátil y concebido para convertirse en un espacio de colaboración en el que puedan ocurrir muchas cosas, supone un paso adelante en la evolución de Luna & Wanda.
La clave del éxito
La receta de Luna & Wanda se ha mantenido fiel a sus principios desde el primer día: ingredientes de máxima calidad, una elaboración artesanal y un proceso cuidado en cada detalle. La mayor parte de las tartas se preparan bajo demanda la noche anterior con productos frescos, se dejan reposar y se entregan a la mañana siguiente en su punto perfecto de cremosidad y tostado. Actualmente, el obrador ofrece siete variedades que ya se han convertido en clásicos reconocibles: La Original, que sigue la receta fundacional sin añadidos; La Pistacchio, con auténtica crema de pistacho siciliano; La Biscoff, con crema Lotus; La Buena, inspirada en el sabor de Kinder Bueno; La Mestiza, con dulce de leche de primera calidad; La Rubia, con chocolate blanco; y La Asustada, con base de galleta Oreo. Cada una mantiene la esencia común de la marca: equilibrio entre el sabor del queso, el dulzor y una textura que oscila entre la solidez justa y la cremosidad sedosa que define a Luna & Wanda. Además de las tartas, Luna & Wanda ofrece en sus locales productos complementarios de marcas amigas como pistacho Valrhona, pistacho siciliano, dulce de leche de Casa Baltar y mermeladas de Liebanartesana, así como cafés de especialidad de Puchero.







