Al día

S.M. el Rey Juan Carlos visita Cruz Blanca Vallecas para probar “el mejor cocido de España”

Antonio Cosmen apuesta por la cocina tradicional en su reconocido restaurante madrileño


 

S.M. el Rey Juan Carlos con el equipo  de cocina de Cruz Blanca Vallecas

Sorprendidos e incrédulos. Así se quedaron, abreviando en calificativos, los clientes del Restaurante Cruz Blanca Vallecas cuando vieron aparecer por la puerta del local al S.M. el Rey Juan Carlos. Acudía a esta popular casa de comidas vallecana el pasado 21 de marzo atraído por la fama de su Cocido Madrileño, el Mejor de España según reza en un premio otorgado por los más reputados especialistas en este guiso secular, que se añade a una larga lista de galardones que adornan sus vitrinas y fogones.

Llegó a Vallecas atraído por la fama del cocido de Cruz Blanca, y la visita se llevó con tal discreción que el propio chef, Antonio Cosmen, supo de la misma con tan sólo unas horas de anticipación por motivos de seguridad. La reserva, para siete personas, llevaba anotada desde hacía dos meses a nombre de una persona “anónima”, y sólo se desveló cuando desde Casa Real comunicaron al restaurante la visita de S.M. el Rey Juan Carlos.

Entró en Cruz Blanca Vallecas ante el estupor de quienes se afanaban en tomar la sopa, o apuraban un aperitivo en la barra del bar. Lo hizo por la puerta lateral, apoyado levemente en un bastón que le sirve de ayuda para caminar tras las intervenciones de cadera a que fuera sometido en épocas pasadas, y dando las buenas tardes a los comensales. Hasta aquí todo normal, salvo las caras de los clientes y las llamadas apresuradas a amigos y familiares: “¡Si te digo a quién acabo de ver entrar en Cruz Blanca Vallecas no te lo vas a creer…!” se escuchaba a este lado del hilo telefónico en apresuradas llamadas a familiares y amigos que seguramente no terminaban de asimilar el mensaje.

Llegaba al restaurante de Antonio Cosmen acompañado por algunos amigos relacionados con el mundo de la gastronomía y seguramente atraído por la fama de sus guisos, que atraviesan fronteras y ha puesto a Vallecas en el punto de mira de los más exigentes críticos culinarios.

El S.M. el Rey Juan Carlos se sentó afirmando que venía a Vallecas “a comer el mejor cocido del Mundo, que me han dicho que se sirve aquí”, y a ello se afanó con esmero durante las algo más de dos horas que duró la comida. No pidió nada que se saliera de la tradición culinaria del local, especializado en platos de cuchara. De ahí que la comida arrancara con los tradicionales entrantes a base de patatas fritas y anchoas del Cantábrico, y las populares croquetas de la abuela que ya en sí mismas son capaces de desfacer hambres y poner en su sitio a los más exigentes paladares.

Llegado el momento del plato estrella, que Antonio Cosmen sirve en Cruz Blanca Vallecas en “dos vuelcos”, él pidió “tomar el cocido mojado”. Esta expresión, nada habitual entre los aficionados a este popular plato madrileño, le llevó a aclarar que “si no había inconveniente, tengo costumbre de tomar todo el cocido de golpe”, mezclando la sopa con los garbanzos, patatas, zanahoriasy demás aderezos del contundente plato. Y así fue, ya que el cocido se puede tomar en uno, dos y hasta tres vuelcos, dependiendo del gusto del comensal.

Aparte tomó los chorizos y morcillas, que Antonio Cosmen trae especialmente de Leitariegos (Cangas del Narcea, Asturias), las puntas de jamón ibérico y el morcillo de la Ganadería Calvín (también asturiano de Leitariegos), que dan al cocido de Cruz Blanca un sabor y una textura difíciles de superar.

Dado que el cocido de Cruz Blanca Vallecas se ofrece como un plato único, pero en realidad se trata de tres platos consecutivos y contundentes, los comensales con su S.M. el Rey Juan Carlos a la cabeza optaron para el postre por una fuente de frutas frías de temporada, compuesta por piña natural, naranjas de Valencia, mandarina y uva tinta de gran calibre, esta última —cuando “explota” en la boca— provoca tal sensación de placer por la fruta que hace imposible no intentar comer una tras otra. Para finalizar, les ofrecieron para probar las torrijas de Semana Santa, un postre tradicional de Cruz Blanca Vallecas en estas fechas.

S.M. el Rey Juan Carlos llegó a Vallecas a probar su afamado cocido acompañado de amigos y personalidades relacionados con el mundo de la gastronomía. Tal vez la presencia más reconocida fue la de la chef Samantha Vallejo-Nágera, muy popular en la actualidad por su papel de jurado en el programa “MásterChef” que emite TVE1, pero con una dilatada y reconocida trayectoria culinaria a sus espaldas. Samantha ejerció de anfitriona perfecta , y a buen seguro tomó nota para que Antonio Cosmen pueda, en una futura edición de su concurso, poner a prueba a sus concursantes en la elaboración de un buen cocido madrileño a la manera tradicional.

Tras finalizar la comida, S.M. el Rey Juan Carlos firmó en el libro de honor de Cruz Blanca Vallecas y se deshizo en elogios hacia el cocido y el trato recibido por el chef Antonio Cosmen y todo el personal del local vallecano. Su agradecimiento llegó a tal extremo, que pidió por iniciativa propia hacerse fotos con el personal del local, que a duras penas cabía en una sola imagen. Igualmente, varios clientes se acercaron al Rey para saludarle y fotografiarse, mientras los teléfonos móviles de comensales que hacía más de una hora habían terminado de comer pero que se resistían a abandonar su mesa, inmortalizaban en sus memorias y en sus pupilas este hecho inédito en Vallecas.

A la salida del local ya se había corrido la voz de que estaba en Vallecas y varios vecinos acudieron para verlo de cerca, aprovechando para hacer fotografías y comentar lo inaudito de la visita y “lo bueno que debe estar este cocido”, cuando personajes de tal relevancia se acercan a Vallecas para probarlo.

No ha sido el primer personaje popular ni será el último en visitar la casa de comidas de Antonio Cosmen. Ministros del actual Gobierno y de los anteriores, políticos de todos los signos y partidos, cantantes, poetas, periodistas populares como José Ribagorda, José María Íñigo o Carlos Herrera, o los más reconocidos críticos gastronómicos, llegan a Vallecas para disfrutar de la comida tradicional y los platos de cuchara. Al premio al Mejor Cocido Madrileño de España, Premio a los Mejores Callos a la Madrileña, Premio a la Mejor Fabada Asturiana de Madrid, Premio Nacional de Hostelería 2015 y Premio Alimentos de España 2016 conseguidos por Cruz Blanca Vallecas y Antonio Cosmen, se suma el favor de los clientes por recuperar los platos de toda la vida.