La mezcla de dos de los productos más saludables de nuestra gastronomía, dan como resultado un plato lleno de vitaminas y bajo en grasas para hacer frente a la llegada de las bajas temperaturas. Incluir carne de conejo y calabaza en nuestro menú, nos ayudará ante la astenia otoñal.
Con la llegada del otoño, las temperaturas bajan considerablemente, se reducen las horas de sol y, en cuanto a alimentación se refiere, aparecen nuevas hortalizas, verduras y frutas que debemos consumir para coger energías de cara al frío invierno. Uno de estos alimentos estrella del otoño es la calabaza que, además de estar en su momento álgido gracias a su uso en Halloween, se la conoce por su pulpa dulce y como el aliado perfecto para proteger y reforzar nuestras defensas. Combinada con carne de conejo, una de las carnes más versátiles del mercado, obtendremos un plato completo y con todos los nutrientes necesarios para reforzar nuestras defensas.
La carne de conejo ofrece múltiples posibilidades de elaboración, gracias a sus diferentes presentaciones podremos realizar una amplia variedad de recetas. Su textura y sabor la hacen única y perfecta para hacer preparados con especias, hierbas aromáticas, vino blanco o tinto, obteniendo deliciosos resultados para el paladar. De la carne de conejo se aprovecha todas las partes, todas exquisitas y con diferentes texturas.
Carne de conejo para combatir el decaimiento otoñal
Pese al, muy inusual, buen tiempo del que hemos disfrutado en las últimas semanas, el otoño ya ha entrado de lleno y con él las bajas temperaturas, los días cortos y las lluvias. Con estas premisas no es de extrañar que nos sintamos más alicaídos, con menos energía y más apáticos de lo normal, por ello debemos de prestar especial atención a nuestra alimentación. En la carne de conejo encontraremos una aliada perfecta para paliar estos síntomas. Su alto contenido en vitaminas del grupo B (B2, B3, B5, B6 y B12) hacen de la carne de conejo un alimento ideal para preparar nuestro cuerpo para el otoño. En concreto, el consumo de carne de conejo cubre las necesidades diarias de vitamina B12, implicada en la producción de glóbulos rojos y el mantenimiento del sistema nervioso.
La carne de conejo es, además, una de las carnes magras más saludables. Baja en grasas, calorías y colesterol, es perfecta para cuidarnos desde dentro y no añadir grasas innecesarias con la llegada del frío. Es también un alimento perfecto para deportistas y para aquellos que decidan empezar a practicar deporte, ya que su consumo nos aporta un índice elevado de proteínas y ayuda a la regeneración de los tejidos musculares tras el ejercicio, y combina a la perfección con cualquier tipo de hidrato. Fuente importante de potasio, hierro, zinc y magnesio, su sabor, textura y aroma la hacen deliciosa y fácil de comer y digerir.
CONEJO MACERADO EN AJO CON PURÉ DE CALABAZA
|
TIEMPO PREPARADO |
TIEMPO COCINADO |
Nº PERSONAS |
|
3 minutos |
45 minutos |
4 |
INGREDIENTES:
- 1 entero conejo troceado
- 4 dientes de ajo
- 1 cucharada de curry
- 1 rama de tomillo
- 200 ml de vino blanco
- 400 g de calabaza
- Cucharada de mantequilla
- Rama de romero
- Aceite de oliva
- Pimienta
- Sal
ELABORACIÓN
- Poner a macerar el conejo troceado el día anterior, con los dientes de ajo majados en el mortero, una cucharada de aceite, el curry y el tomillo. Conservar en la nevera.
- Poner el conejo en una fuente, añadir el vino blanco e introducirlo en el horno, durante 45 min a 180º C, dándole la vuelta cada 15 minutos, aproximadamente.
- Colocar la calabaza cortada en dados en una bandeja de horno sobre papel de aluminio con un poco de aceite de oliva, sal y pimienta y la ramita de romero. Hornearla durante 30-40 minutos aproximadamente. Cuando esté hecha, pasarla por un pasapurés junto con la mantequilla.
- Servir el conejo junto con el puré de calabaza.
TRUCO
También se pueden usar paletillas de conejo