Con acceso exclusivo a Cala Ferrera, el hotel se encuentra en un enclave natural único a escasos kilómetros de la Reserva Natural de Mondragó
Dentro del universo de calas de arena blanca, acantilados, vegetación típicamente mediterránea y aguas transparentes, renace tras una completa renovación al pie de Cala Ferrera Barceló Aguamarina, un espacio perfecto para disfrutar de unas vacaciones de relajación y desconexión.
El mar produce un efecto positivo en el cuerpo, la mente y el alma. Son muchos los estudios que confirman sus propiedades y beneficios como la mejor terapia para relajarnos después de unos meses de duro trabajo, desconectar de la rutina y deshacernos del estrés acumulado que provocan los grandes espacios urbanos. Aprovechando su espectacular ubicación, Barceló Aguamarina es la apuesta este verano para disfrutar de estos beneficios en primera persona.
7 beneficios de dormir junto al mar
Siguiendo esta tendencia, Barceló Aguamarina desgrana las siete razones por las que disfrutar de unas vacaciones durante las que dormir cerca del mar será la mejor decisión para nuestra salud.
- Ayuda a la relajación porque cerca del mar nuestro cerebro se relaja.
- La brisa marina es buena para dormir porque el aire suele ser más limpio y fresco, con niveles más altos de oxígeno que pueden mejorar el sueño.
- El sonido del mar influye en nuestros ritmos internos y nos proporciona una sensación de paz y un efecto calmante.
- El color azul del mar se asocia a un estado de apertura, profundidad y sabiduría.
- La proximidad al agua mejora el rendimiento y disminuye la ansiedad.
- Respirar la brisa marina actúa de forma muy positiva en nuestro sistema respiratorio, facilitando la descongestión y limpiando los pulmones.
- Disfrutar del mar, estar cerca de él, rejuvenece el cuerpo y la mente.
Barceló Aguamarina, un diseño por y para Mallorca
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Barceló Aguamarina cuenta con 417 habitaciones, muchas de ellas con espectaculares vistas al turquesa del mar de una de las calas más asombrosas de la isla, Cala Ferrera; dos impresionantes piscinas – una de ellas frente al Mediterráneo –, y una variada oferta gastronómica que incluye tanto cocina mediterránea tradicional de la isla como cocina internacional.
El diseño del Barceló Aguamarina, concebido por y para Mallorca, combina tonalidades de pantone aguamarina, que referencian los turquesas del mar, con tonos cálidos que varían del naranja al rojo evocando sus amaneceres y atardeceres. Destacan las siluetas sinuosas y orgánicas en lámparas, mobiliario y detalles decorativos. La artesanía y la tradición local está muy presente en los estampados de estilo Ikat y en las cerámicas que decoran los diferentes rincones del hotel. En Barceló Aguamarina, comienza una nueva historia.