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Las hierbas ibicencas se llaman Familia Marí Mayans

La marca de bebidas espirituosas Hierbas Familia Marí Mayans ha patentado su propia botella con forma de mujer payesa en todos los formatos para convertirla en la insignia de la empresa y hacerla reconocible en cualquier lugar del mundo. La quinta generación de esta familia renueva la imagen de la marca conservando siempre la esencia ibicenca en un producto elaborado al cien por cien en la isla blanca. Además, para los eventos especiales y para coleccionistas presenta un nuevo envase en formato magnum de tres litros.

Familia Marí Mayans cuenta con el 90 por ciento del mercado de los distintos tipos de licores tradicionales de la isla y recolecta, destila, macera y embotella el 100 por cien de su producto en Ibiza.

La receta de sus hierbas fue creada en 1800 por Juan Marí Mayans en la isla de Formentera y sus productos se anunciaban ya entonces como digestivos. Según expresa uno de sus gerentes, Carlos Marí Mayans, “nuestro tatarabuelo era conocedor de las hierbas y de sus propiedades y venían los vecinos con algún dolor y él les recetaba infusiones”. De este conocimiento y de su experiencia en una destilería en Barcelona nacieron las primeras hierbas que ahora se han convertido en el emblema indiscutible de la isla de Ibiza.

Los productos de Familia Marí Mayans, y en concreto sus hierbas ibicencas, son las encargadas de abrir y cerrar cualquier momento importante en la isla, además de acudir a todas las ferias internacionales de promoción turística de la mano del Consell d´Eivissa y de Adlib Moda Ibiza. En 2018 tendrán, por primera vez, stand propio en una de las ferias de alimentación nacionales más importantes de Europa: Alimentaria que se celebrará en Barcelona. Según expresa Carlos Marí Mayans, “queremos diferenciarnos y que nuestros clientes de siempre no dejen de sorprenderse sin cambiar el sabor de nuestro producto”. Para ello han diseñado una botella de cristal exclusiva, que emula la figura de una payesa ibicenca para llevar la esencia de la auténtica Ibiza por todo el mundo. Marí Mayans, remarca que “para nosotros ha sido un gran esfuerzo patentar este diseño para diferentes capacidades, desde los 4 centilitros hasta los 10, 20 o 35, así como en los casos de 0,7 litros, 1 y 3 litros, porque somos una empresa pequeña, pero apostamos por seguir siendo punteros e ir un paso por delante de nuestros competidores”. A las famosas hierbas hay que sumarles la Frígola, el licor de Palo y una variedad de absenta a los que hace tres años se les unieron el IBZ Ginebra Premium y el vodka Svedra.

No es un secreto que la música mueve montañas y Familia Marí Mayans no es la primera marca de bebidas espirituosas que se ve beneficiado por esta. Y es que este licor lleva en su historia la evolución de la isla de Ibiza. Comenzó siendo un digestivo para los locales y poco a poco ha ido evolucionando y seduciendo a las nuevas generaciones que la han llevado hasta las pistas de baile convirtiéndose en una alternativa diferente a los combinados y bebidas alcohólicas habituales. Sin variar su sabor en más de cien años de existencia ha conseguido darles un toque auténtico a las noches más cosmopolitas y tiene su espacio en las barras más exclusivas. De este modo, ha encandilado los paladares de los mejores DJs del mundo que de tanto disfrutarla han querido exportarla hasta Estados Unidos. Esta casualidad les llevó hace unos años a verse en un cartel de doce metros en la fachada de la discoteca Space de Miami. Norte América completa la lista europea de países que ya han querido disfrutar del sabor de Ibiza en cualquier momento. Como explica Carlos Marí Mayans, “el mercado local es el que más producción se lleva, pero actualmente también exportamos a Alemania, Italia, Suiza, Holanda y Gran Bretaña”. “Nuestra pretensión es ir mucho más y exportar la marca Ibiza tal y como soñaban nuestros abuelos”, matiza.

Utilizada en combinados, sola, con hielo o en la cocina, las hierbas Marí Mayans son un imprescindible en cualquier viaje, celebración, encuentro o feria donde Ibiza tenga un espacio. Además, se ha convertido en la bebida indiscutible y sin competidores con representación en todos los hogares de la isla. Tanto es el arraigo que sienten los ibicencos hacia esta mezcla que un 80 por ciento de su producción se queda en la isla y el resto satisface a los paladares más exquisitos del extranjero. Su marca forma parte de la lista de productos con Indicación Geográfica Protegida y todavía se elabora de forma tradicional. Según apunta Marí Mayans, “lo único que hemos variado es que tenemos gas centralizado para tener fuego para fundir el azúcar y destilar, mientras que hace 70 años lo hacíamos con leña y con un palo para remover” bromea. El auténtico sabor ibicenco tiene nombre desde hace más de un siglo y su receta la tiene la familia Marí Mayans.