La compañía del Grupo Vall Companys International Casing Products (ICP), dedicada al faenado, procesado y selección de productos de casquería y tripa natural para embutidos, ha presentado en la Feria Internacional para la producción animal (Figan) en Zaragoza su apuesta por el aprovechamiento y revalorización de todos los subproductos del cerdo.
Durante la conferencia celebrada bajo el nombre Economía Circular: valorar el cerdo más allá de la carne, el director de ICP, Nacho Echeverría, ha expuesto la labor de la compañía en dar esa “valorización” de los subproductos procedentes del sacrificio y despiece del cerdo, además de las industrias que se benefician.
Echeverría destaca que “la valorización dentro de la propia industria alimentaria necesita un alto grado de innovación que haga que un subproducto, que podría ser considerado un residuo, sea utilizado como materia prima susceptible de ser transformada en productos comestibles y deseables por los consumidores, que son además una fuente excelente de nutrientes tales como aminoácidos esenciales, minerales y vitaminas”.
Cabe destacar que una de las principales vías de aprovechamiento de la casquería (vísceras blancas y rojas) es el uso directo como alimento. Las vísceras blancas y rojas del cerdo son consideradas como un manjar en países como China, Filipinas, Japón, Corea del Sur, Tailandia, Malasia, México, etc. ICP se encarga de seleccionarlas, limpiarlas, envasarlas y congelarlas para su posterior comercialización y expedición, todo ello bajo los más exigentes estándares higiénicosanitarios.
Productos de gran utilidad para embutidos y medicamentos
Por otro lado, las tripas de cerdo son obtenidas como un producto secundario en el sacrificio del cerdo en las salas de tripería en las que opera ICP. Se trata del envoltorio estrella para la elaboración de embutidos, tanto cocidos como curados, ya que cuenta con múltiples beneficios frente a otras alternativas existentes en el mercado (permeabilidad, elasticidad, comestibles, biodegradables y ecológicas).
La grasa de cerdo es comúnmente usada como grasa comestible de manera similar a la mantequilla, cuyas cualidades dependen de la parte del cerdo de donde procede y de la forma en que ha sido procesada. También se describe su utilización en la fabricación de jabones y cremas.
Además, el cuidado de nuestras mascotas exige cada día una mayor atención por su alimentación. Desde ICP se suministra un producto fresco y sano como ingrediente para la elaboración de piensos y comidas. De este modo, se consigue minimizar al máximo el desperdicio alimentario, al mismo tiempo que se promueven prácticas de economía circular.
Por último, el sector porcino está conectado estrechamente con la industria farmacéutica, ya que muchos medicamentos importantes son derivados de origen animal. En las salas de tripería de ICP se encargan de extraer la mucosa del intestino del cerdo para su utilización como ingrediente en la elaboración de heparina. También, la extracción del páncreas, órgano valorado por sus propiedades digestivas (disolución de azúcares, carbohidratos y lípidos), hace que la industria farmacéutica lo utilice como ingrediente en la fabricación de insulina.
Trazabilidad total y garantía de calidad
ICP, con sede en Mercazaragoza, ha pasado de producir 4,5 millones de tripas en 2016 a los casi 12 millones que produce en la actualidad, manteniendo un ritmo de crecimiento de doble dígito en los últimos años. La compañía cuenta con un taller de calibrado propio en Zaragoza, a través del cual controla la trazabilidad del producto, ofreciendo a sus clientes un nivel extra de garantía, versatilidad y personalización.