Esta temporada, Martin Miller´s Gin se convierte en la opción perfecta para crear un verdadero momento Sólarfrí
La llegada del mes de abril marca la inauguración de la temporada donde los planes constantes se convierten en parte de la rutina diaria. Es el comienzo de una época dedicada a disfrutar de los placeres simples de la vida, alargando las horas de desconexión y conectando con aquello que verdaderamente importa mientras se disfruta de largas jornadas al sol poniendo en práctica el auténtico significado de Sólarfrí, la original tradición islandesa con la que Martin Miller’s Gin invita a celebrar la llegada de la primavera.
Literalmente, Sólarfrí significa “vacaciones al sol”, y es un tiempo libre de compromisos que los islandeses se dan para disfrutar cuando hace sol. Porque para Martin Miller 's Gin tomarse un Sólarfrí es mucho más que una simple pausa en la rutina: es un estado de ánimo, una forma de entender el mundo que busca el equilibrio en nuestras vidas para disfrutar y desconectar del estrés diario de una forma espontánea. ¿Y qué mejor forma que hacerlo que con el combinado perfecto para la primavera?
Además de ser la bebida de moda, el Gin Tonic es un combinado muy versátil que encaja a la perfección con diferentes platos, recetas y momentos. Su sencilla elaboración, una equilibrada mezcla de ginebra y tónica, la hace perfecta para
disfrutarlo en cualquier ocasión. Pero para lograr el mejor combinado, la elección de la ginebra adecuada es fundamental: nada mejor para eso que Martin Miller’s Gin, una ginebra Super Premium de personalidad única con la que preparar un Gin Tonic perfecto para celebrar la llegada de la primavera gracias a sus toques florales y cítricos.
Martin Miller 's Gin está destilada en Inglaterra y mezclada con agua de Islandia. Esta dualidad la hace única ya que está elaborada con el agua más pura del mundo, lo que hace que no sea necesario ningún proceso artificial para ser utilizada. Su destilación se lleva a cabo a través de un proceso poco convencional de doble destilación: los botánicos terrosos y los botánicos cítricos se destilan por separado, dando como resultado una ginebra perfectamente equilibrada.