No existe una fórmula mágica para llegar a la excelencia. La constancia es el único camino para hacer evolucionar tu talento, aunque este se materialice en algo muy breve, casi efímero. Como la combinación de notas que encajan perfectamente después de horas componiendo, un golpe de spray único e irrepetible que se convierte en graffiti, un truco de skate que sale bien después de muchas caídas o el paso de baile que has estado ensayando hasta clavarlo. Esa expresión creativa, corta y concisa esconde mucho trabajo detrás. Este es el mantra del nuevo proyecto de Jägermeister, #BETHEMEISTER, que nos anima a creer en lo que queramos, pero sin dejar nunca de creer en nosotros mismos. Jägermeister reúne en esta iniciativa a cuatro Meisters y sus respectivas disciplinas creativas: música, skate, arte contemporáneo y baile.
Los cuatro Meisters comparten un mismo moto: marcan sus propias reglas, estableciéndose como referentes dentro de sus campos artísticos por su personalidad original, insider y disruptiva. La skater Andrea Wilshusen, el neopintor Abel Iglesias, el músico Chenta Tsai (aka Putochinomaricón), y la profesora y bailarina de afrobeats, Fatu Africangyal, han sido los elegidos para demostrar que la pasión y la perseverancia son las claves para alcanzar el perfeccionismo irreverente.
Para Andrea Wilshusen, el skate es una forma de ver el mundo exterior, pero también su interior. Empezó a patinar a los 10 años en Barcelona, junto a su hermana gemela, Júlia. Desde pequeña ha sido consciente de que había pocas chicas en los skateparks y de la barrera que existe para las mujeres en un deporte aún considerado por muchos como “masculino”. Esa concepción le ha dado las ganas y motivación extras para romper estereotipos, truco tras truco, convirtiéndose así en una de las principales referentes dentro del panorama skater nacional.
Abel Iglesias es un artista multidisciplinar que comenzó en el mundo del graffiti a los 12 años. Se define como “neopintor”, aunque no hay una sola etiqueta que describa completamente todo su campo de acción. Su juventud no ha supuesto un límite en su camino hacia la exploración del espacio urbano como lienzo. En él ha plasmado múltiples formas de arte basadas en la abstracción, la combinación de materiales, los colores y lo efímero. Arte contemporáneo en su más pura esencia.
A Chenta Tsai, aka Putochinomaricón, nada se le resiste. Estudió violín en el conservatorio, es arquitecto, además de columnista en El País, donde escribe con humor ácido y honestidad refrescante sobre cultura pop y temas generacionales. Pero Chenta va aún más allá: a través de su faceta como músico y performer, no solo crea, sino que también se levanta contra toda convención social. Con una personalidad directa, irreverente y activista, es uno de los artistas más transgresores (y completos) del país.
En cada coreografía, Fatu Africangyal consigue mezclar auto expresión, empoderamiento femenino y mucho groove. Como referente en el territorio del afrobeats, un género musical africano nacido en los 70s, Fatu enseña a sus alumnas el poder del movimiento corporal haciendo honor a su cultura y disfrutando de cada paso. El trabajo constante, la sororidad y la diversión son sus pilares para ser cada día la mejor versión de sí misma.
Los cuatro Meisters son el ejemplo de que llegar a la maestría no es un camino fácil: requiere mucha dedicación, esfuerzo y constancia, además de creer en uno mismo sobre todas las cosas. Al igual que Jägermeister que siempre se ha mantenido fiel a su ADN y a la personalidad auténtica que le caracteriza. Gracias al savoir-faire de sus maestros destiladores y a sus más de 80 años de historia, podemos disfrutar hoy del sabor único de sus 56 ingredientes de la mejor manera posible: a -18°, en un ICE COLD SHOT. Un acto breve que esconde una gran historia.
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