Sanosil ofrece la solución a la bacteria que destruye la producción de langostinos


El sector de la cría del langostino en cautividad lleva años sufriendo grandes pérdidas económicas a causa de la Vibrio harveyi, una bacteria que causa una altísima mortalidad en la producción acuícola de langostino en países productores del mundo entero.
 
El cambio climático empeora esta situación, ya que las nuevas condiciones de temperatura aceleran el crecimiento de la bacteria y sus mutaciones genéticas.
 
La bacteria Vibrio harveyi es el patógeno más importante del langostino. Más aún en sistemas de producción acuícolas que, por sus condiciones, ofrecen un hábitat que propicia el crecimiento de la bacteria. En el año 2012 el problema era acuciante en Irán. El país es uno de los principales productores del mundo. El mismo problema enfrentaban Indonesia, Filipinas y Taiwán. En un brote en Tailandia, la Vibrio harveyi causó la muerte de entre el 70 y el 100% de las larvas de camarón (langostino) que se cultivaban en distintas poblaciones.

La industria acuícola, como vemos, no está exenta de la amenaza de los microorganismos y de la necesidad de evitar las infecciones. Como ocurre en todo el sector alimentario, es obligación de los productores salvaguardar la seguridad alimentaria de los consumidores ofreciendo productos frescos libres de patógenos. La mejor forma de lograrlo es mediante exhaustivos protocolos de higiene y desinfección.
 
El cultivo del camarón comúnmente llamado langostino -señala Isabel Falgás, Directora de marketing y comercial de Sanosil- en el mercado español es un importante motor económico en países de todo el mundo. Se trata de un apreciado alimento común en las mesas, más aún en las celebraciones Navideñas”.
 
En beneficio de este nicho de mercado -añade Falgás- hemos llevado a cabo experimentos con nuestro desinfectante Sanosil Super 25 con resultados muy gratificantes”.
 
Mohammad Saeed Ganjoor del Centro de investigación genética y reproductiva de peces de agua fría del Instituto Iraní de Investigación en Ciencias Pesqueras ha sido el encargado de estudiar la susceptibilidad “in vitro” de las bacterias Vibrio harveyi ante Sanosil Super 25.
 
El propósito del experimento fue evaluar la MIC (concentración inhibitoria mínima) y la MBC (concentración bactericida mínima) de Sanosil Super 25 contra un aislado de Vibrio harveyi obtenida de langostinos de cultivo acuícola infectados.
 
Las conclusiones señalan que Sanosil Super 25 logra inhibir el crecimiento de la bacteria en un valor de 0,015% (15ppm), pero con esta concentración aún continuaba viva. Sin embargo, aumentando la concentración a 20ppm, la Vibrio harveyi muere por la acción biocida de Sanosil Super 25.
 
Hay que añadir, además, que Sanosil Super 25 está completamente indicado para la desinfección de la bacteria en agua de mar, ya que los ensayos contenían Cloruro de Sodio, elemento que necesita la bacteria para crecer. El efecto de Sanosil fue el mismo sin verse afectado por el cloruro sódico.  
 
Sanosil Super-25 ha sido elegido por ser un desinfectante altamente eficaz contra todas las bacterias patógenas, biopelículas, hongos, moho, virus y amebas, pero al mismo tiempo, ser un producto con muy baja toxicidad para los langostinos.
 
Los dos componentes principales, el hidrógeno peróxido como agente oxidante y plata con su potente efecto oligodinámico y catalítico, se combinan en Sanosil mejorando el efecto desinfectante de cada una de las dos sustancias activas por separado hasta en un 1.000%.