Como cada 22 de marzo, el mundo se une para celebrar el Día Mundial del Agua. Una jornada que, en definitiva, invita a reflexionar sobre el uso que hacemos de este bien de vital importancia para nuestra supervivencia y de suministro limitado. Miele, la marca líder de electrodomésticos premium, conoce la necesidad de hacer un uso responsable de los recursos que ofrece la Tierra y traslada estos principios de eficiencia energética y en el consumo de agua a la fabricación y funcionamiento de sus propios electrodomésticos.
Al contrario de lo que comúnmente se piensa, el lavado a mano no gasta menos agua que aquel que se realiza mediante un lavavajillas. Es más, según datos de una prestigiosa Organización de Consumidores, una persona gasta 88,8L de agua diarios de media mediante un lavado a mano mientras que un lavavajillas estándar consume 54,2L a diario. En el caso de Miele, los lavavajillas de la marca pueden llegar a consumir 6L de agua por ciclo de lavado, lo que supone un ahorro de agua de un 93% con respecto al lavado a mano tradicional o de un 54,25% con relación al gasto de un lavavajillas tradicional.
Esta comparativa muestra que con el uso de un lavavajillas de Miele puedes ahorrar hasta 82,8L en tus lavados; lo que equivaldría, aproximadamente, a acciones cotidianas como realizar la ingesta de agua recomendada para un ser humano durante más de un mes, darse una ducha de 8 minutos, poner una lavadora o regar un césped convencional de 8 metros cuadrados.
Esta reducción en el gasto de agua es posible gracias el programa AUTOMÁTICO de sus lavavajillas, desarrollado para llevar a cabo una limpieza eficaz del menaje resistente con restos de suciedad de diferentes alimentos. En esta línea, otro de los programas de lavado que sigue los mismos principios de ahorro de la marca es el modo ECO, que consume 8L por ciclo de lavado y que además es eficiente energéticamente, al tratarse de un electrodoméstico de clase A, el grado más alto que se puede alcanzar en la escala de la eficiencia energética.
Por otra parte, otro de los programas más usados por los clientes es el QuickPowerWash, Se trata de un programa corto de lavado de solo 58 minutos para vajilla con un grado de suciedad normal y que consume 10,5 litros por uso.
De esta forma, con el desarrollo de este tipo de tecnologías, Miele demuestra estar a la vanguardia de la fabricación e innovación de aparatos electrodomésticos que garanticen su durabilidad con el paso del tiempo. Por este motivo, los electrodomésticos de la marca están diseñados para durar 20 años y son testados hasta tres veces más que el motor de un coche antes de su comercialización como una muestra del compromiso de Miele con la sostenibilidad y la preservación y cuidado del planeta.