Al día

Las Palmas de Gran Canaria, el destino definitivo para sentir al verano en Semana Santa


Con la Semana Santa a la vuelta de la esquina, el hotel Santa Catalina, a Royal Hideaway Hotel se presenta como un destino en sí mismo donde disfrutar de ocio, cultura y la mejor gastronomía de la isla

Canarias es ese destino hecho a medida para cualquier época del año. Un lugar único donde disfrutar del tándem sol y playa los 365 días del año, y de una sensación de desconexión que pocos lugares son capaces de ofrecer. De ahí que, de cara a las escapadas de Semana Santa, el archipiélago sea una de las primeras alternativas para muchos viajeros.

En Las Palmas de Gran Canaria encontramos un hotel que sorprende en todos los sentidos. Santa Catalina, a Royal Hideaway Hotel‘Mejor hotel de España’ en los World Travel Awards– es un auténtico emblema de Gran Canaria, y que lleva décadas sirviendo de escenario cultural, gastronómico y arquitectónico a la ciudad.  En él, alojamiento y destino van a la par gracias a su privilegiada ubicación y exquisitez de sus espacios.

Comodidad y exclusividad de un hotel 5*GL

El hotel se encuentra en el casco antiguo de Las Palmas de Gran Canaria, a escasos kilómetros de la Playa de Las Canteras y de Vegueta; un eje central entre los tres puntos clave de la ciudad donde disfrutar de los encantos de la localidad, de largos paseos frente al mar, tardes al sol y los mejores atardeceres.

No es casualidad que, desde su inauguración en 1890, el hotel se haya constituido como un lugar de referencia de la vida social y cultural de la ciudad, por el que han pasado algunas de las personalidades más importantes de los siglos XX y XXI, como Sir Winston Churchill, Agatha Christie y Alfonso XIII. Reconocido como Mejor hotel histórico de lujo de Europa. Y es que pasar unos días en  Santa Catalina, a Royal Hideaway Hotel entregarse a experiencia llena de glamour, la autenticidad y exclusividad. Desde su diseño de estilo clásico a sus elegantes habitaciones con vistas a la ciudad o al jardín de palmeras pasando por una oferta gastronómica de altura. Tanto es así que su restaurante Poemas by Hermanos Padrón fue el primer restaurante en las islas en recibir una estrella MICHELIN. En definitiva, un lugar donde escapar de la rutina y abrazar los placeres de la vida.