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La importancia de bienestar animal para la calidad de los productos

Los consumidores españoles cada vez muestran más interés por conocer los procesos de elaboración de las empresas. Con respecto a la industria cárnica, estos últimos años ha habido un movimiento que mostraba gran preocupación por el bienestar animal. Y es que las empresas que aseguran el bienestar animal, a parte de garantizar que cuidan a los animales en las mejores condiciones y respetando las normativas indicadas de cada sector, pueden garantizar de forma directa la buena calidad de los productos que obtienen.

De hecho, este es uno de los puntos destacables de los productos ibéricos y clave para identificar un jamón serrano, por ejemplo, frente a un jamón ibérico. “Desde el comienzo de la empresa hemos velado por el bienestar animal, que vivan en libertad, les asegura un espacio donde poder moverse, de esta forma se alimentan de los frutos de los árboles y otras plantas, y nos proporciona productos con una calidad increíble” afirman desde la empresa de jamones Enrique García.

Y es que los cerdos que viven en las mejores condiciones son de los que obtendremos productos con más sabor para disfrutar.

Pero ¿cómo podemos identificar de forma sencilla qué productos y/o empresas respetan este punto?

Dentro de los ibéricos existen unos precintos, que son lo que conocemos también como bridas, que nos ayudan a identificar el estilo de vida y alimentación de los animales, con lo cual, esta información nos ayuda de forma sencilla a identificar los productos y las empresas que si han respetado este aspecto:

Brida negra: Jamón de bellota 100% ibérico. Con alimentación a base de bellotas, hierbas y recursos naturales de la dehesa.

Brida roja: Jamón de bellota ibérico. 50% raza ibérica o 75% raza ibérica. Con alimentación a base de bellotas, hierbas y recursos naturales de la dehesa.

Brida verde: Jamón de cebo de campo ibérico. 50% raza ibérica, 75% raza ibérica o 100% raza ibérica. Con alimentación a base de piensos y hierbas del campo.

Brida blanca: Jamón de cebo ibérico. 50% raza ibérica, 75% raza ibérica o 100% raza ibérica. Con alimentación a base de piensos.

Sin brida: El sector del ibérico siempre identifica bien sus productos, por lo que, si no lleva brida, lo ideal es preguntar en la tienda o espacio en el que estemos comprando para que los profesionales puedan darnos la información.