Los cambios de temperatura hacen que la piel sufra más de lo habitual y por ello hay que reforzar su capacidad protectora.
Junto con los problemas frecuentes del cambio de estación, el uso de la mascarilla produce efectos negativos extra en nuestra piel, por lo que hay que hidratarla antes de su uso.
Quinton propone varios consejos para incluir en la rutina diaria y cuidar tu piel para que ella te cuide a ti.
Comienzan a bajar las temperaturas, y ya tenemos que hacer el cambio de armario. Guardamos la ropa de verano y sacamos la de otoño, incluyo ya algunas prendas de invierno. Estamos en esta época del año en la que hay muchos cambios de temperatura: un día podemos dar un paseo con una chaqueta de entretiempo y al día siguiente tenemos que desempolvar el abrigo más grueso del armario.
Con estos cambios tan bruscos, la piel sufre más de lo habitual, y por ello, debe reforzar su capacidad protectora. Nuestra epidermis funciona al 100% con todos sus mecanismos, y todo esto hace que nuestra piel se muestre fría, muy seca y pálida. Puede llegar a descamarse, picar y producir una sensación de desasosiego realmente incómoda. A las personas mayores les afecta mucho más, ya que la piel va perdiendo capacidad de reacción.
Además, a los problemas propios del cambio de estaciones, le sumamos la situación actual que estamos viviendo, donde tenemos que pasar mucho tiempo con la mascarilla puesta. Esta nos protege de muchos elementos externos, pero produce efectos negativos en nuestra piel. Algunas de las principales consecuencias es enrojecimiento de la piel, picor y gran sequedad. Es recomendable no utilizar maquillaje bajo la mascarilla, limpiar e hidratar mucho la piel con productos adecuados.
La piel es el órgano más grande del cuerpo humano y es el encargado de actuar como barrera protectora frente al medio externo. La piel nos relaciona con el mundo, hace que sintamos placer o dolor gracias a las terminaciones nerviosas y a los millones de sensores que tenemos distribuidos a lo largo de toda nuestra anatomía. Realiza un montón de funciones básicas sin las cuales no sería posible la vida. Por estos motivos y muchos más, uno de los compromisos más importantes que tenemos con nuestro cuerpo, es cuidar nuestra piel.
A continuación, Quinton, laboratorio biotecnológico alicantino dedicado a la fabricación de especialidades naturales a base de agua de mar, ofrece las claves para cuidar tu piel de la mejor manera:
- Mantente hidratado por dentro para estarlo por fuera para que los niveles de agua en tu cuerpo estén equilibrados y la barrera protectora esté más fortalecida y flexible. Así, tu piel estará protegida ante agentes externos, previene la sequedad y evita la aparición de imperfecciones.
- La exposición en exceso provoca sequedad, quemaduras y un envejecimiento prematuro. Nuestra piel no solo está expuesta al sol cuando vamos a la playa o a la piscina en verano, también cuando salimos de casa en cualquier época del año. Utiliza protector solar cada dos horas para bloquear el daño que provocan las radiaciones ultravioletas.
- Crea una rutina diaria, recordando que hay que evitar el uso de agua muy caliente, ya que daña la piel y utilizar los productos que sean adecuados para ti.
- Recupera tu equilibrio mineral, ya que la degradación de la cadena alimentaria provoca la aparición de alteraciones relacionadas con carencias minerales en nuestro organismo. Para ello, te recomendamos utilizar Quinton Dermo Action, que ofrece un aporte fundamental y equilibrado de los minerales presentes en el agua de mar. Este spray dermatológico actúa como acondicionador de la piel y mantiene las buenas condiciones, ayuda a evitar los efectos nocivos para la piel de factores externos.
- Además, es muy importante tener un descanso óptimo, para ello hay que dormir por lo menos ocho horas diarias, y llevar una dieta equilibrada. Consume alimentos ricos en antioxidantes, vitaminas, vegetales verdes, frutas, tomate, alimentos ricos en Omega-3 y 6.