Al día

Vuelve la Absenta, el hada verde que ha inspirado generaciones de artistas rebeldes


En el restaurante Astrolabius de la calle Serrano revive el ritual del mítico destilado del siglo XIX

 

¿Café? ¿Postre? ¿O un chupito de Absenta? No hace falta viajar con la imaginación al viejo París de los impresionistas para que un camarero nos ofrezca aquel elixir de sabor anisado y color verdoso cuyo origen remonta al convento de Couvert, donde las monjas lo vendían como una delicatessen y que pronto se convirtió en aquel diablo verde símbolo de la vida bohemia.

Ahora la Absenta vuelve a vivir su momento de gloria en el Restaurante Astrolabius, que presume de una refinada colección de botellas del mítico destilado prohibido hasta hace muy poco en muchos países de Europa.

En este  rincón de las delicias con alma de bistró podremos probar el ajenjo siguiendo su antiguo ritual que consiste en servir una copa de cristal con una cuchara perforada encima de la cual se deposita un terrón de azúcar que irá deshaciéndose con agua fría confiriendo a la absenta ese color lechoso y opalescente que apreciamos en los cuadros de Edgar Degas.

Todo un ritual pensado para seducir los comensales de Astrolabius, un pequeño santuario de la alta cocina informal que juega a mezclar sabores y tradiciones con irreverencia y gran talento.