LA SALVE se alza con 3 premios en los World Beer Challenge

Sirimiri, Txirene y Botxo son palabras muy comunes para los bilbaínos, pero desconocidas fuera de los límites de la Villa… hasta ahora. Se trata de tres cervezas de LA SALVE, las primeras que se elaboraron en la nueva fábrica de la cervecera vasca en Bilbao, que es el mayor centro productivo de cerveza de Euskadi, y que han visto reconocida su altísima calidad con un tres “Oscars de la cerveza”.

La primera cervecera de Euskadi en ventas ha visto reconocida la altísima calidad de sus cervezas con 2 Oros y 1 Plata en los World Beer Challenge. Se trata de la única cervecera de Euskadi galardonada en los premios cerveceros más importantes del mundo y una de las doce de todo el Estado que han recibido este reconocimiento.

Los World Beer Challenge son uno de los reconocimientos más importantes del mundo de la cerveza. En el certamen de este año han participado un total de 701 cervezas, de las cuales 488 pasaron a la final y 242 consiguieron llevarse un galardón. De estas 242, se han premiado a 29 cervezas españolas de las empresas cerveceras: Mahou San Miguel, Estrella Galicia, Ambar, y LA SALVE Bilbao.

Las cervezas de LA SALVE premiadas son LA SALVE Txirene (91 puntos) y LA SALVE Botxo (90 puntos) con sendos Oros y LA SALVE Sirimiri con una Plata (89 puntos).

Se trata de cervezas kilómetro cero, elaboradas con cebada 100% alavesa bajo la batuta del maestro cervecero de LA SALVE, Luis Cachón, en la fábrica de Bilbao inaugurada hace ahora un año en la capital vizcaína.  En palabras de Cachón “es un honor para una cervecera como la nuestra recibir tal reconocimiento. En LA SALVE elaboramos nuestras cervezas con un proceso muy cuidado, con materias primas de altísima calidad y con una dosis importante de pasión y de creer en lo que hacemos. Este premio nos anima a seguir adelante trabajando como lo hemos hecho hasta ahora con ilusión y responsabilidad”.

 

LA SALVE: compromiso con su historia y con el futuro

Cuando Eduardo Saiz Lekue y Jon Ruiz Ibinarriaga, dos emprendedores amigos desde la infancia, decidieron hace 4 años “despertar” cervezas LA SALVE, ya tenían muy claro que no solo reflotaban una empresa local, sino que su historia estaría ligada a la de Bilbao para siempre y que, precisamente esto, sería una de sus fortalezas y de sus mayores responsabilidades a la hora de competir en un mercado dominado por 5 empresas que controlan más del 99% de la venta actual y donde solo con marcas posicionadas que enamoren a los consumidores serán capaces de sobrevivir en dicho mercado.

LA SALVE Sirimiri, LA SALVE Txirene y LA SALVE Botxo son cervezas kilómetro cero, elaboradas con cebada 100% alavesa y mediante procesos de altísima calidad y que acaban de ser reconocidas por los premios de la cerveza más relevantes del mundo.

LA SALVE  Sirimiri, fue la primera cerveza que se produjo en la nueva fábrica de LA SALVE en Bilbao y se caracteriza por ser una cerveza fácil de beber, pero con matices de olores frescos y a cebada. LA SALVE Txirene, por su parte, se caracteriza por su especial sabor a lúpulo y por ser cerveza de tendencia para los consumidores que buscan productos complejos; y LA SALVE Botxo, es una cerveza de trigo con mucha personalidad que ha cosechado un gran éxito entre los consumidores a lo largo de los meses que lleva en el mercado.

LA SALVE continúa sumando iniciativas y trabajando en su objetivo de conseguir el 10% de la cuota de mercado de Euskadi en los próximos años. Fruto de su compromiso con el entorno más cercano y con la creación de riqueza y valor añadido en su territorio, elabora todas sus cervezas con materias primas del entorno, como la cebada, 100% de Álava. Además experimenta desde hace dos años junto con el Gobierno Vasco y Neiker en la producción de lúpulos locales para conseguir una cerveza kilómetro cero 100% real.

 

Acerca de LA SALVE

LA SALVE inauguraba hace ahora un año su fábrica en Bilbao. Se trata de la tercera fábrica que LA SALVE pone en marcha contando la que nació en 1886 en la Campa de La Salve y la posterior en la calle Artasamina. La puesta en marcha de lo que es el mayor centro productivo de cerveza de Euskadi ha conllevado una inversión de 2 millones de euros y supone el arranque de la producción de LA SALVE en Bizkaia. La nueva fábrica ha comenzado produciendo a un ritmo de 200.000 litros de cerveza km0 al año, con un cuidado proceso de elaboración y selección de la materia prima con origen cercano; cerveza generadora de valor, en unas instalaciones a la vanguardia de las fábricas cerveceras de Europa y con la idea de aumentar la producción paulatinamente.  LA SALVE es la segunda cervecera más antigua del país en activo y cuenta en su accionariado con la contribución de Mahou San Miguel, que posee un 42,7% en la cervecera bilbaína. Esta relación ha sido clave para reabrir la fábrica en la capital vizcaína. Con la puesta en marcha de estas instalaciones, LA SALVE recupera la producción local después de que su antigua fábrica cerrase sus puertas en 1977.

Las capacidades y recursos de Mahou y su respeto a un proyecto local están colaborando a que LA SALVE pueda cumplir su sueño de reinventar esta marca como cerveza de Bilbao que aspira a recuperar su hueco en el sector cervecero y conseguir el 10% de la cuota de mercado desde sus compromisos con lo próximo.

LA SALVE nace en 1886 de la mano de José Schumann y Cordés, hijo de un cervecero alemán, que instala una fábrica destinada a la elaboración de cervezas y bebidas gaseosas junto a la Ría. La fábrica original se ubicó en sus orígenes en la Campa de La Salve y de ahí heredó su nombre. Posteriormente se trasladó a poca distancia, al inicio de la calle Artasamina, pero siempre mantuvo un puesto de venta de cervezas en la Campa donde nació.

Desde 1910, LA SALVE estuvo en manos de la familia Pérez-Yarza, que regentaba en Bilbao numerosos negocios de alimentación y hostelería, entre ellos los cafés Boulevard y Arriaga, el Bar Carabanchel y el Hotel Excelsior.

www.lasalvebilbao.com