Diferentes opciones para vivir el Día del Solterín… o en pareja San Valentín

Celebrar fechas señaladas en el calendario nunca pasará de moda y, tanto para los que han encontrado el amor como para los que no lo necesitan o no han tenido suerte, hay dos fechas muy próximas para vivirlas con pasión: el 13 de febrero, día del soltero, y el 14 de febrero, San Valentín, son días perfectos para festejar de la manera más creativa o romántica posible la libertad o el amor. Yummeat, la marca de golosinas 0% azúcar, apta para almas libres o parejas conectadas, ofrece varias opciones.

Mientras medio mundo se viste de rojo y flores que nos inundan la primera quincena de Febrero, otras personas prefieren celebran la víspera de San Valentín, el 13 de Febrero, como el día del soltero. Estés en el grupo que estés, existen diferentes planes tanto si buscas celebrar la soltería como si quieres festejar el amor.

Para los solteros

En España, y según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), hay cerca de 8,5 millones de personas, de entre 25 y 65 años, sin pareja. El objetivo de este día es que nadie se quede sin celebrar y que todos los solteros del mundo festejen y recuerden que no es nada malo no tener pareja.  

Para parejas

A pesar de haberse convertido en una fecha totalmente comercializada en la que, desde bastantes días antes nos invaden con todo tipo de publicidad, también son muchísimas las parejas de todo el planeta a las que les gusta celebrar este día de un modo especial y romántico.

Golosinas saludables para los dos días

Como cualquier fecha importante en nuestro país, la tendencia para celebrar ambos días sigue siendo la comida y, en este caso en concreto, a las golosinas típicas, tanto para los solteros como para las parejas, se añaden las de Yummeat, los dulces saludables pioneros en nuestro país, con 100% sabor y 0% de calorías. Cada año surge la oportunidad de seguir sorprendiéndote a ti mismo o al compañero/ra de aventuras de la forma más cálida y personal. Y si lo hacemos de manera original, cada año puede ser inolvidable. Atrevámonos a vivir un San Solterín y  San Valentín diferente.