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“Como en casa, en ningún sitio”. La comida de nuestra madre se echa de menos cuando se vive y trabaja lejos de casa, sobre todo teniendo en cuenta que España es uno de los países donde más se come fuera (6 de cada 10 personas comen fuera de casa actualmente). Tomar ejemplo de muchas costumbres que se han visto (y comido) en el hogar resulta el pilar perfecto para mantener una alimentación equilibrada y, sobre todo, disfrutar de la cocina. Con motivo de recordar los orígenes más “hogareños” y saludables, Kaiku Sin Lactosa, la gama más amplia de lácteos sin lactosa del mercado, comparte los trucos de madre más gastronómicos.
Amortizar el tiempo en la cocina La regla por excelencia para quienes no disponen de tiempo para cocinar: ser eficientes preparando los menús semanales. Un buen truco de madre es preparar grandes cantidades de comida mediante utensilios prácticos como la olla exprés. De esta forma no solo se ahorra tiempo entre fogones, sino que además se evita la tentación de comer fuera al almacenar la comida en distintos recipientes para toda la semana.
Conocer el valor de los productos frescos Con una conciencia y responsabilidad sobre la alimentación de toda la familia, las madres han apostado durante años por los mejores productos del supermercado o del mercadillo semanal, donde se encuentran las verduras y frutas más frescas y responsables con el entorno (kilómetro 0). El valor añadido de un plato elaborado tiene como base que una materia prima de calidad.
Camuflar la comida Una de las tareas más complicadas de ser padres es lograr que los alimentos menos apetecibles (como las verduras) convivan perfectamente en el menú semanal de los más pequeños. Una de las mejores formas de preparar comidas saludables y que además contengan verduras o pescado (alimentos más reacios a ser consumidos) es “encubrirlos” con varias técnicas: preparando una bechamel ligera con leche sin lactosa, convirtiendo las verduras en cremas suaves o hacer hamburguesas de pescado. Al disfrazar estos alimentos, se hacen más apetitosos y fáciles de comer.
Apostar por la sobremesa De acuerdo con Juan Cruz, de la Academia Navarra de Gastronomía y autor del libro “Teoría elemental de la gastronomía”, el acto de comer acompañado tiene beneficios: es una buena herramienta comunicativa y positiva, ya que asociamos el hecho de pasar tiempo con la familia o amigos con una comida sana y satisfactoria. Las comidas en familia que los padres han inculcado durante años pueden reproducirse en la oficina, de la mano del tupper y junto a los compañeros de trabajo.
Los viejos remedios (casi) nunca fallan Otra práctica “muy de madre” y que es importante mantener incluso lejos del hogar es la de los trucos o remedios caseros: el del vaso de leche antes de dormir, o miel cuando comienzan los primeros coletazos de un resfriado. El primero, es efectivo ya que la leche contiene un aminoácido (triptófano) que ayuda al cuerpo a producir melatonina, la hormona del sueño. Para digerirlo mejor y aligerar el sueño, una buena opción es optar por su versión sin lactosa. Por otro lado, la miel, gracias a su alto contenido en azúcar, funciona como antiinflamatorio y combate la tos, suavizando la garganta. |
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Acerca de Kaiku Sin Lactosa La gama de lácteos sin lactosa más completa del mercado que ayuda a las digestiones fáciles y ligeras, destinada a todos aquellos que quieran llevar una vida ligera y exprimir al máximo el estilo de vida moderno mientras que disfrutan de lácteos equilibrados y de calidad. Leche, batidos, yogures, natas y quesos ligeros y digestivos que se adaptan a todos los consumidores y necesidades para garantizar una alimentación saludable: el complemento perfecto para nuestro estilo de vida. Tags: Kaiku Sin Lactosa, #daelpaso |
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