La Carlota, el nuevo restaurante de comida fusión en el barrio de Las Salesas de Madrid

En pleno barrio madrileño de Las Salesas acaba de abrir sus puertas La Carlota, un nuevo restaurante de cocina fusión internacional que rinde homenaje a la mujer a través de la gastronomía, el arte urbano y el diseño en un espacio moderno, de estilo contemporáneo e industrial situado una de las zonas más chic de la capital.

Su cocina abierta al comedor fusiona sabores, ingredientes y técnicas culinarias de distintas culturas gastronómicas, orientales y occidentales, expresadas en una amplia y variada carta formada por una exquisita selección de exóticos platos fríos y calientes pensados para compartir.

La Carlota es el primer proyecto en España de un grupo de restauración formado por cuatro socios con más de 12 años de experiencia en el sector y varios restaurantes en Caracas y la isla caribeña de Aruba.

Como chef ejecutivo, al frente de los fogones se encuentra Gian Franco Curzi, uno de los talentos que ha forjado Venezuela. Con más de 20 años en el gremio, este caraqueño de origen italiano ha replicado en la capital madrileña el mismo formato de cocina estructurada en cuatro zonas o estaciones de elaboración del resto de locales de la compañía.

De la estación Pantry llegan los tartares, ceviches, ensaladas, carpaccios y otros platos fríos y salsas de gran elaboración, preparados al momento fusionando materias primas de diferentes procedencias. En el área de Sushi, el sushi master Gregori Rondón preparara de forma artesanal y creativa diferentes platos de técnicas de sushi, entre los que hay gran variedad de makis, sashimis, nigiris y otras propuestas de la gastronomía nipona fusionada con cocinas diversas del mundo occidental. Por su parte, la barbacoa japonesa Robata es la gran protagonista de la zona de grill en la que, por sus altas temperaturas, se elaboran rápidamente a la parrilla diferentes cortes de carnes, pescados y verduras con calor indirecto a base de carbón que conserva todo su sabor original. En la línea caliente es donde se trabajan de forma muy cuidada todos los platos al wok, salteados, a la plancha y frituras, como los mini tacos de robalo acevichado, las lechuguitas de cerdo crocante, el pollo agridulce, las croquetas de queso de cabra o las deliciosas empanadas manchegas, además de diferentes tipos de arroces, risottos y sopas.

“Somos algo muy ecléctico porque combinamos muchos estilos culinarios y tendencias gastronómicas con la idea de crear una cocina fusión basada en la mezcla de culturas, ingredientes, estilos culinarios y texturas procedentes de países diversos tanto asiáticos, como latino americanos o europeos. A través de materias primas de procedencia diversa y distintas técnicas de elaboración, trato de jugar con los sabores reversionando platos de cada gastronomía sin perder su esencia original”, señala el chef.

“El concepto gastronómico es el mismo en todos nuestros locales, comida fusión internacional para compartir y disfrutar entre varios comensales haciendo de la gastronomía una fiesta sobre el centro la mesa. Buscamos a un público que quiera comer bien, beber un buen coctel y disfrutar de un buen ambiente. La intención de nuestra carta es que todo sea para compartir y que el comensal pueda degustar varias propuestas de platos y cocteles disfrutando así de una experiencia gastronómica y mixológica a través de distintos sabores, texturas y colores procedentes de culturas de todo el mundo”, explica Iván Antonety, uno de los propietarios y cabeza visible del proyecto en España.

 

Alma, Cocina y Espacio se funden en un mismo espíritu de sabores

Formado por un comedor principal con capacidad para unos 40 comensales y dos espacios reservados para grupos de entre 8 y 20 personas, el local, presidido por una gran barra en la entrada, es una secuencia de espacios generados por la estructura inicial de los bajos de un edificio histórico ubicado en el número 11 de la calle Almirante de Madrid.

El proyecto de arquitectura e interiorismo lleva la firma del estudio con sede en Miami CGA Arquitectos, que ha conservado los elementos estructurales originales como el ladrillo de obra vista de las paredes y bóveda, cables telefónicos y tuberías antiguas.

Una espectacular lámpara transparente que flota bajo el techo, espejos infinitos que crean una sugerente sensación de profundidad en las paredes así como los tres grafitis gigantes en los que el artista urbano El Rojo ha plasmado la cara de una mujer son algunos de los aspectos más destacados de la decoración e interiorismo de La Carlota, cuyo mobiliario de mesas y sillas se ha fabricado artesanalmente y a medida fundiendo materiales como el acero, el mármol y la madera.

“Queríamos La Carlota se convierta en un nuevo símbolo de la gastronomía en Madrid. Nuevos platos, nueva cocina y nueva ciudad generan nuevos conceptos y nuevas propuestas. Tratar de materializar a través de la arquitectura la cocina del restaurante fue todo un reto y al mismo tiempo un privilegio por ser nuestro primer proyecto en España”, señala el arquitecto Carlos Guevara.

 

Restaurante La Carlota

C/ Almirante 11, Madrid

Reservas: 910466283

Horario de 14:00h a 16:00h para comidas y de  20:00h a 02:00h para cenas y primera copas. Lunes cierre semanal

Precio medio: de 30 a 40 euros

Web: www.lacarlotarest.es