AECOC presenta el calendario de aprovechamiento para estas navidades

Campaña “Una Navidad Sin Desperdicios”

Se acerca la Navidad y con ella los excesos con la comida. Por mucho que intentamos ajustarnos a las cantidades que necesitamos, siempre acabamos cocinando de más comida.  El resultado, muchas veces, es el desperdicio de muchos alimentos. El 42% del total del desperdicio se produce en casa del consumidor. Por ello, desde AECOC han preparado un calendario con ideas para evitar el derroche de alimentos y reaprovechar el excedente para así fomentar un consumo equilibrado en Navidad.

Es la fecha que muchos eligen para hacer la compra. Es muy importante llevar una lista con lo que necesitamos y no caer en la compra compulsiva y acabar llenando el carro de productos que no vamos a consumir. Para hacer esta lista, primero hay que comprobar los ingredientes de los que ya disponemos. Lo mejor es evitar compras de última hora y con prisas, si dispones de más tiempo, te ayudará a escoger mejor los artículos.

 

Pistoletazo de salida a las reuniones familiares, llega la Nochebuena. Si la celebras en casa, piensa en tus invitados para así cocinar un menú acorde a sus gustos. También es importante tener en cuenta las raciones para cada comensal para ajustarse lo más posible, por ejemplo, las raciones de los niños son distintas a la de los adultos.

 

En el caso de que celebres la Navidad fuera de casa, te recomendamos que no tengas reparos en pedir una caja para pedir todo lo que no hayas podido consumir. Es una excelente medida para reaprovechar los alimentos y reducir el desperdicio alimentario en los restaurantes.

 

Seguro que habrá sobrado comida del día de navidad y puede ser un suculento plato para el día siguiente. Por ejemplo, unos canelones hechos con los restos del caldo de Navidad estarán muy sabrosos y, además, estaremos dando una segunda vida a los alimentos. Es una oportunidad para arriesgar y reinventar para crear nuevos platos reaprovechando las sobras del día anterior.

 

Una opción para no desperdiciar la comida que sobra en la mesa es congelarla. Muchos de los alimentos conservan las mismas propiedades y sabor. Pero hay que tener cuidado al descongelar, se debe hacer a temperatura ambiente y evitar los cambios bruscos de temperatura.

 

La mejor manera de empezar bien el año es hacerlo con orden. Distribuir bien los alimentos en la nevera para saber los productos de los que dispones es muy útil. También colocarlos de manera que se puedan conservar mejor.  Por ejemplo, en la zona más cálida, la que se mantiene entre 6 y 10 grados, deberían ir alimentos como huevos, leche, mantequilla, frutas y legumbres frescas. La zona más fría, que llega a cuatro grados bajo cero, es buena para conservar carnes y pescados, postres lácteos y alimentos en proceso de descongelación.

 

Podemos darle rienda suelta a nuestra imaginación y rescatar esas sobras convirtiéndolas en nuevos y suculentos platos. Reaprovechar es una práctica muy recomendable para evitar el desperdicio. Muchas recetas deliciosas y tradicionales se pueden hacer a partir de restos de guisos como, por ejemplo, los canelones, lasaña o croquetas.

 

Revisa y ten en cuenta los consejos de conservación de los alimentos que se muestran en las etiquetas para evitar que se estropeen. Fecha de caducidad y consumo preferente son dos conceptos que no deben confundirse. Mientras la primera advierte sobre el día límite a partir del cual el alimento no es adecuado para el consumo desde el punto de vista sanitario, el consumo preferente hace referencia al tiempo en el que el producto mantiene intactas sus propiedades, sin que su ingesta suponga un riesgo para la salud. 

 

Para la cena de Nochevieja también te recomendamos que pidas la cantidad que consideras que podrás comer y no dejar llevarte por la glotonería, es mala consejera y al final no podemos acabarnos todo lo que hemos pedido.

 

AECOC y desperdicio alimentario en España

Europa genera el 14% del desperdicio mundial de alimentos y España es el séptimo que más comida desperdicia del continente, con 7,7 millones de toneladas

Ante esta problemática el Consejo Directivo de AECOC aprobó en 2.012 trabajar en un proyecto destinado a frenar este problema. Un proyecto de colaboración entre todas las partes de la cadena (sector primario, industria, distribución, administración y bancos de alimentos) que cuenta con el apoyo de más de 450 empresas fabricantes y distribuidoras del sector del gran consumo, servicios logísticos y transporte. Las empresas integradas en el proyecto han logrado reducir en un 30% la cantidad de producto desperdiciado en estos 7 años e incrementar en un 13% la cantidad de producto que, tras no ser comercializado, se ha donado a entidades benéficas.