El desayuno es clave en una dieta saludable y los cereales, acompañados de lácteos, frutas y agua, son una opción excelente para ayudarnos a cubrir las necesidades de energía y nutrientes esenciales.
Hoy, 28 de mayo, es el Día Nacional de la Nutrición, que se celebra para recordar la importancia de seguir una alimentación saludable. Kellogg está comprometido con la nutrición desde su origen, demostrando que se puede construir algo muy grande desde algo muy sencillo: un grano de cereal. Por ello evoluciona sus recetas constantemente para ofrecer lo mejor de los cereales de desayuno combinando los beneficios nutricionales, la sencillez y el sabor.
Desde 1999, ha reducido la sal de sus cereales de desayuno más de un 52%. En España desde 2011 se han reducido en total 1.700 toneladas de azúcares de la dieta de españoles, equivalente a 340.000 millones de cucharaditas de azúcar. Adicionalmente siguen trabajando en la receta comprometiéndose a reducir un 10% de azúcar y un aumento en el contenido de fibra los alimentos Kellogg`s dirigidos a niños para finales de 2022, sin renunciar al sabor.
Special K©, Choco Krispies© y Corn Flakes de Kellogg’s© están enriquecidos con 8 vitaminas y minerales, incluyendo vitamina D, B1, B2, niacina, B6, B12, ácido fólico, y hierro, ofreciendo el 50% de la ingesta diaria de vitamina D, lo que contribuye al normal mantenimiento de los huesos y ayuda al normal funcionamiento del sistema inmunitario. Además, el 92% de los cereales de desayuno de Kellogg’s© son fuente de fibra.
Las últimas recomendaciones sobre alimentación de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) consideran que la adopción de una dieta variada y equilibrada, caracterizada por un menor consumo de alimentos de origen animal y un mayor predominio de alimentos de origen vegetal, que cumpla con los requerimientos calóricos establecidos y las recomendaciones dietéticas para frutas y hortalizas, puede mejorar el estado de salud y bienestar; a la vez que reduce el impacto medioambiental[1]. Este predominio de alimentos vegetales forma parte de la dieta mediterránea, patrón alimenticio seguido por la población española.
En el contexto de una alimentación saludable, el desayuno juega un papel fundamental. De acuerdo con la Fundación Española de Nutrición (FEN)[2], un desayuno saludable es aquel que es variado, completo, equilibrado y satisfactorio, el cual se recomienda que aporte entre el 20% y 25% de la ingesta total de energía diaria, tanto en niños como en adultos. Tal y como apunta Deisy Hervert, doctora en Nutrición y responsable de Nutrición de Kellogg, “es recomendable que, en el grueso de nuestra dieta, cada una de las comidas sea variada y equilibrada, asegurándonos de que hay alimentos de todos los grupos para ayudar a cubrir las ingestas nutricionales recomendadas diarias”.
Sin embargo, aún hoy en día uno de los clásicos errores que cometemos en nuestra alimentación es no desayunar. Según el estudio ANIBES[3], el desayuno cubre tan solo el 17% de la ingesta diaria de energía recomendada para la población española, es decir, está por debajo de la ingesta energética recomendada para esa toma diaria.
De manera general, se recomienda incluir en el desayuno un alimento del grupo de los cereales, otra fuente de proteínas, como los lácteos, y una ración de fruta fresca. Pero también, en un desayuno equilibrado, pueden incorporarse otros alimentos típicos de la dieta mediterránea como son el tomate, los huevos, el jamón, los frutos secos o el aceite de oliva. Combinando estos 3 grupos de alimentos se contribuye a cubrir las recomendaciones de consumo diario de cada uno de ellos, y su consumo por separado se asocia a unos mejores patrones alimentarios[4]. Diversos estudios señalan los beneficios de una dieta rica en alimentos vegetales, como el tomate, los frutos secos o semillas, además de frutas y cereales; y el desayuno constituye uno de los mejores momentos para incorporarlos. Desde el punto de vista de la nutrición, el grupo de los cereales constituyen la base de nuestra alimentación en el patrón de alimentación de la Dieta Mediterránea. Y es que son la principal fuente de hidratos de carbono complejos, que destacan por su contenido en vitaminas del grupo B, vitamina E, minerales y fibra.
“Los cereales de desayuno Kellogg’s son alimentos de origen vegetal fuente de fibra y nutrientes, por lo que encajan perfectamente como parte de una dieta variada, equilibrada y sostenible, y dentro de un estilo de vida saludable”, aclara Deisy Hervert. Además, matiza que “el desayuno es clave en una dieta saludable y los cereales, acompañados de alimentos fuente de proteínas como los lácteos y fruta fresca, son una opción excelente para ayudarnos a cubrir las necesidades de energía y nutrientes esenciales, necesarios ahora más que nunca dada la situación que atravesamos”.