La Federación Nacional de Industrias Lácteas (FeNIL) celebró ayer, en el Casino de Madrid, el 61º Día Internacional Lácteo (DIL), una cita que se ha convertido en un referente para representantes de la industria, autoridades de las Administraciones de Agricultura, Sanidad y Economía y Comercio, científicos y representantes de diferentes organizaciones relacionadas con el sector. Un encuentro que, este año, ha apostado por combinar ponentes nacionales e internaciones, y por versatilizar las temáticas con el fin de reflejar los nuevos retos a los que se enfrenta el sector.
Este hecho ha sido recalcado por el nuevo presidente de FeNIL, Aurelio Antuña, en su discurso de apertura; quién destacó el que supone uno de los grandes hitos de la industria este año: “La caída del consumo ha experimentado un punto de inflexión. Un signo que, aun siendo débil, es esperanzador”. Antuña hizo especial hincapié en la importancia de “despertar a un consumidor que, de manera ‘inconsciente’, ha estado reduciendo la ingesta de productos lácteos, a pesar de considerarlos importantes”. Además, dedicó unas palabras a la labor científica “que, año tras año, arroja nuevos estudios con relación a los beneficios de la leche, como herramienta principal para rebatir bulos “
Así, según los datos oficiales del Ministerio en el último año se ha producido un incremento global en el consumo de leche y productos lácteos del 0,43%. El consumo de leche líquida experimentó un incremento del 1,5%, el de yogures y leches fermentadas del 0,5% y el de quesos un 2,1%.
Los beneficios de los lácteos traspasan fronteras
Precisamente, la labor investigadora ha tenido una significativa representación internacional en esta edición, un hecho que ha permitido conocer la percepción sobre la leche y los lácteos en distintas zonas europeas. El debate central “Para una sociedad sana, un sector lácteo en forma”, moderado por el periodista agroalimentario César Marcos, ha contado con tres vertientes diferentes: la Matriz Láctea; el papel de los lácteos en la dietas sostenibles y, por último, el Despoblamiento rural. España vacía.
“Las últimas investigaciones epidemiológicas sostienen que el consumo de lácteos está asociado a un menor riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, accidentes cerebrovasculares, además de tener la capacidad de proteger frente a la diabetes tipo 2 o cáncer colorrectal”, explicaba Stephan Peters, representante de la Asociación Láctea Holandesa. Durante su ponencia, recalcó que “esta afirmación se hace aún más evidente si atendemos al concepto de matriz láctea, en lugar de a sus nutrientes de manera individualizada”; partiendo de este planteamiento, el experto hizo una llamada a las lagunas que existen en este campo, y ha apostillado que “las líneas generales de los estudios deberían centrarse en los efectos de alimentos como conjunto, en lugar de en sus nutrientes aislados”.
También trató los beneficios de los lácteos para la sociedad Judith Bryans, presidenta de la Federación Internacional de Lechería, en su ponencia “El papel de los lácteos en las dietas sostenibles”. Bryans expuso una cuestión de máxima importancia en la actualidad como es el coste medioambiental en relación a la fabricación de alimentos: “Las dietas sostenibles tienen que ser accesibles, asequibles, nutritivas y respetuosas con el medio ambiente. La producción de alimentos tiene siempre un coste medioambiental, así que cuando se haga balance de qué alimentos pueden formar parte de una dieta sostenible hemos de considerar cada detalle concreto”. En este sentido, la presidenta de la FIL hizo hincapié en el compromiso -como sector- de reducir la huella ambiental de los productos lácteos; área en el que, según expresaba, han conseguido grandes avances hasta el momento, siendo los lácteos productos esenciales a la hora de hablar de dietas sostenibles
De la huella medioambiental a la importancia del sector como soporte de la España vacía
El último bloque de la jornada tuvo un carácter agroalimentario gracias a la ponencia “Despoblamiento rural. España vacía”, de Alicia Langreo, representante de Sociedad de estudios Saborá. Según la experta, la mejor forma de acabar con dicho despoblamiento pasa por reforzar aquellas actividades que funcionan de manera razonable, normalmente relacionadas con los sistemas productivos alimentarios locales o comarcales (incluyendo actividad agraria o ganadera). “La producción y la transformación de leche constituyen uno de estos sistemas capaces de generar riqueza y empleo en el mundo rural, y que se mantiene en territorio donde cae la población”, expresó Langreo, quien recalcó, además, que el sector “aporta positivamente al equilibrio demográfico del país”.
Como es tradicional, FeNIL realiza un reconocimiento a aquellas personas, instituciones u organizaciones, que con su trabajo han contribuido a difundir los beneficios de la leche y productos lácteos. Este año los galardonados han sido la Federación Española de Bancos de Alimentos (FESBAL), por facilitar el acceso a la leche y los productos lácteos a los más desfavorecidos, y a la eurodiputada Pilar Ayuso, por su defensa del sector lácteo no solo en España, sino en el seno de la Unión Europea.
El acto fue clausurado por Oscar González Gutiérrez-Solana, vocal de la Dirección Ejecutiva de AESAN.
EL Ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, D. Luis Planas, presidió el almuerzo que se celebró a continuación.
Sobre la Federación Nacional de Industrias Lácteas (FeNIL)
La Federación Nacional de Industrias Lácteas (FeNIL) integra a más de 60 empresas del sector, que representan más el 95% de la producción nacional de productos lácteos. Los principales objetivos de FeNIL son promover el consumo de leche y productos lácteos en general por sus cualidades saludables y nutricionales; reforzar la creencia establecida entre el público en general de que los lácteos son buenos y comunicar la diversidad de lácteos existentes en el mercado.