Uber lanza por quinto año consecutivo #UberIceCream, un servicio especial que permite a usuarios de todo el mundo disfrutar en cualquier punto de la ciudad de un pack de helados, con tan sólo pulsar un botón en la app de Uber. Y por primera vez, #UberIceCream se lanza también en Madrid, donde Uber vuelve a estar presente desde marzo de este año con su servicio uberX.
Así, este viernes 15 de julio todos los madrileños que lo deseen podrán solicitar #UberIceCream desde cualquier punto de la ciudad y disfrutar en tan sólo unos minutos de un pack de seis helados Magnum Mini. El servicio, que estará disponible entre las 13.30h y las 18:30h, en las horas de más calor, tendrá un coste de 5 euros y podrá solicitarse a través de una opción especial en la parte inferior del menú principal de la aplicación.
Desde Abu Dhabi a Zurich, pasando por Madrid, los helados serán entregados por tierra, mar y aire, dependiendo de los servicios que ofrece Uber en los diferentes países. En el caso de Madrid, como parte del compromiso de Uber con un modelo de movilidad más sostenible, la entrega de los helados se realizará exclusivamente con motos eléctricas de Cooltra, empresa de alquiler de motos líder en Europa.
Uber lanza #UberIceCream de forma simultánea en más de 400 ciudades del mundo para celebrar el verano. La idea de acercar este placer veraniego a usuarios de todo el mundo en cuestión de minutos nació en 2012 y, desde ese momento, el número de ciudades participantes se ha multiplicado año tras año, convirtiendo esta acción en una especie de competición entre ciudades para ver quien entrega los pedidos de la manera más original. Este año, en distintas ciudades del mundo, los helados llegarán a los usuarios en coches de caballos, drones o motos acuáticas.
Sobre Uber
La misión de Uber es hacer que el transporte sea tan fiable como el agua corriente – en cualquier lugar y para todo el mundo. Empezamos en 2009 para solucionar un problema simple: ¿Cómo conseguir un viaje con sólo pulsar un botón? Seis años y más de mil millones de viajes más tarde, hemos comenzado a afrontar un reto aún mayor: reducir la congestión y la contaminación en nuestras ciudades llevando a más personas en menos coches.
