Gullón apuesta por la eficiencia energética

La galletera participa en el proyecto europeo REEMAIN que permitirá reducir sus emisiones

Galletas Gullón participa en el pionero proyecto europeo REEMAIN, financiado por la UE, que tiene como objetivo diseñar la factoría del futuro en base a criterios de eficiencia energética y gestión sostenible de los residuos generados durante los procesos de fabricación. El proyecto, que se puso en marcha hace dos años y medio y tiene un presupuesto de 9,8 millones de euros, está liderado por el Centro Tecnológico CARTIF que coordina a 16 socios de 6 países que estos días están reunidos en la sede de Gullón en Aguilar de Campoo. Gullón es la única empresa española que servirá como caso de estudio. 

Los resultados tecnológicos obtenidos en la investigación se probarán y validarán en tres fábricas de distintos sectores: Galletas Gullón, fabricante de galletas; Bossa, empresa textil turca; y SCM, fundición situada en Italia. La metodología consiste en utilizar modelos de simulación predictiva para la producción que se usarán para establecer nuevas y eficaces herramientas de gestión energética. Estas herramientas proporcionarán  información sobre los flujos de energía, la huella de carbono y su relación con la producción y  la programación y el abastecimiento de la planta. Gullón es la única empresa española que servirá como caso de estudio. 

De esta manera, el proyecto pretende conseguir una producción cercana a los cero residuos (zero carbon manufacturing), dentro de los estándares de eficiencia energética 2.0. Todo ello integrando la generación, conversión, distribución, control, uso, almacenamiento y reutilización de los recursos energéticos necesarios para la fabricación. 

Líneas de actuación en prueba piloto

Gullón tiene previsto implantar, como prueba piloto, cuatro líneas de actuación en sus factorías. Solo las pruebas piloto contribuirán a una reducción anual de emisiones de CO2 de 360 TM/año, que representa casi un 1% las emisiones anuales totales de la factoría. 

Una vez concluida la fase piloto, se conocerá qué medidas han dado mayor rendimiento (económico, técnico y ambiental), de forma que puedan ser replicadas en otras líneas e instalaciones de la fábrica. Las líneas de actuación son: 

Primero, recuperar el calor residual en la fase de cocción de las galletas. Esta medida permitirá reducir el consumo de gas natural y las emisiones de CO2. Segundo, control eficiente de los sistemas de refrigeración. Se trata de aprovechar el aire frío del exterior de la fábrica para reducir el consumo de electricidad empleado en la generación de frío industrial. Tercero, control eficiente de las calderas usadas en el proceso de fabricación, con el fin de reducir el consumo de gas natural y las emisiones de CO2.  Y cuarto, sistema de gestión de energía SCADA, medida con la que se pretende monitorizar de forma continua los consumos energéticos de las etapas principales de una línea de forma que se pueda observar el efecto individual que múltiples condicionantes externos e internos pueden tener sobre los consumos energéticos del proceso.