Finca los Hoyales, Premio Harpers Design

Finca los Hoyales, de la bodega Cruz de Alba, recibe el prestigioso galardón que premia diseño y originalidad, siendo el único vino español que consigue este reconocimiento.

El diseño es un ingrediente vital para el éxito de cualquier marca de bebidas. Los Harpers Design Awards tiene como objetivo reconocer cada año diseños recientemente lanzados, rediseñados o bien ya establecidos.

Finca los Hoyales, cuya primera añada salió al mercado a principios de este año, no deja de cosechar galardones a nivel internacional. Si hace poco obtuvo 96 puntos Decanter, con una Medalla de Oro, ahora es su elegante diseño el que se lleva los elogios de la crítica extranjera, que se ha fijado en su botella como un referente y le han hecho merecedora del Packaging Design Trophy.

Y es que en la elaboración de este vino Premium se han cuidado no sólo el contenido, realizado siguiendo los más estrictos principios de la agricultura biodinámica, sino también la botella, de borgoña y aspecto robusto que luce una etiqueta hecha de tela de un color natural donde la ilustración muestra el gesto sencillo de dos manos que ofrecen el fruto, “directo de la tierra hasta ti”. 

Un Ribera del Duero de las bodegas Cruz de Alba (Quintanilla de Onésimo, Valladolid) que ha competido al más alto nivel de estándares, ya que en cuanto a packaging y diseño el mercado del Reino Unido disfruta de algunos de los mejores en el mundo.

La decisión del jurado ha sido unánime, “realmente este producto destaca por encima de lo normal”, dijo el editor de Harpers.

 

Agricultura biodinámica

Finca Los Hoyales 2012 está elaborado con uvas 100% Tempranillo procedentes del pago del mismo nombre, una microparcela de 1,8 hectáreas plantada hace más de 50 años ubicada en Padilla de Duero (Valladolid). Desarrollado siguiendo los más estrictos principios de la agricultura biodinámica, agrohomeopática y radioestesia, se vendimió de manera manual con selección de racimos en campo, y fermentó en barricas nuevas de roble francés, donde realizó su proceso de crianza durante 22 meses sin trasiegos. Un vino de color cereza oscuro con ribetes granates, de extraordinario potencial aromático e innumerables registros frutales, balsámicos y minerales. 

Desde esta bodega pequeña y artesanal en plena milla de oro de la Ribera, su enólogo Sergio Ávila destaca por su respeto a la naturaleza y por la búsqueda del equilibrio con el entorno como modo de vida. Con una producción limitada, las 6.000 botellas de esta añada 2012 se han elaborado con todo el esmero y dedicación que el propio vino nos ha ido diciendo, desde el mismo momento de su vendimia.

La parcela pertenece al viñedo más antiguo de la finca, con cepas plantadas hace 53 años, donde la tierra es muy pobre y se expresa con intensidad y nos da un rendimiento muy escaso. Sin embargo, son las plantas quienes se autorregulan para cubrir sus necesidades y así ofrecer lo mejor de ellas: Ya lo decía mi abuelo. Si el terreno no vale para patatas, hay que plantar trigo, si tampoco éste se da bien, entonces pon cebada. Y si no, centeno. Si ni siquiera es bueno. Entonces planta tu viña”, dice Sergio Ávila.

La cosecha 2012 fue muy buena, a pesar de los cambios climáticos que sufrió la añada. Porque, como bien explica, ningún año es igual que el anterior, “por eso, empezamos de cero en cada ciclo. El sabor, el color y el aroma de nuestro vino dependerán exclusivamente de la acción de la Naturaleza sobre los cultivos”.

 

Sobre Bodegas Cruz de Alba

Bodegas Cruz de Alba, comenzó su primera elaboración en el año 2003. Situada en el entorno de Peñafiel, la Milla de Oro de la Ribera del Duero, esta bodega boutique cuenta con 40 hectáreas de viñas, cuya plantación comenzó en 1963, en espaldera y a una altura de 700 metros de altitud en suelos franco arenosos muy pobres. El viñedo cuenta con unas condiciones inmejorables para la producción de vino de calidad. Además, existe una considerable proporción de viña vieja, lo que ayuda a la hora de obtener vinos con un marcado carácter. 

Son numerosos los premios que ha recibido la bodega. Cruz de Alba recibió el premio al Mejor Tempranillo del Mundo 2013 y ha recibido numerosas medallas de oro en numerosos concursos internacionales desde su fundación.

www.cruzdealba.es