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¿Sabes cuál es el desodorante más antiguo de la historia?


Los egipcios, en la Edad Antigua, ya utilizaban baños aromáticos y empleaban aceites perfumados para disfrutar de buen olor corporal. Pero no fue hasta el siglo XIX cuando comenzó la fabricación de desodorantes utilizando métodos
experimentales y científicos. La empresa MUM, en 1.888, revolucionó el mercado con la creación del primer desodorante de la historia.


La eliminación del olor corporal ha sido un deseo y una conquista que se remonta la Edad Antigua aunque no ha
sido un hecho constante a lo largo de la historia. Los egipcios, entre muchas pruebas y experimentaciones, observaron que eliminando el vello de las axilas reducían notablemente el olor corporal. Los griegos y los romanos obtuvieron
desodorantes perfumados basados en las antiguas fórmulas llegadas de Oriente a través de Egipto. Se basaban en
maceraciones de aceite, extracto de plantas, aloe, mirra y resinas vegetales principalmente.


Pero durante gran parte de la historia del hombre, además de realizarse baños de manera frecuente y regular, los únicos desodorantes utilizados eran los perfumes, que sólo servían para enmascarar un olor con otro más potente y sólo de una manera pasajera.


La costumbre de bañarse y además utilizar perfumes se extendió desde Oriente por toda Europa. En este continente, en la Alta Edad Media, sólo las clases altas, nobles y comerciantes se bañaban con cierta frecuencia y sus mujeres se lavaban,
perfumaban y arreglaban sus cabellos en locales especiales.


La Edad Moderna trajo un cambio radical en el aseo personal y en las costumbres higiénicas. Se habían perdido todas las influencias y enseñanzas médicas venidas de Oriente. Los médicos del siglo XVI creían que el agua caliente, sobre todo, debilitaba los órganos y dejaba el cuerpo expuesto a la influencia de los aires malsanos.


Pensaban que sus efectos penetraban a través de los poros de la piel y así transmitían todo tipo de males. Incluso se difundió la idea de que una capa de suciedad era la mejor protección frente al ataque de las enfermedades. El aseo personal debía realizarse “en seco” y solamente con una toalla limpia frotando las partes más visibles del cuerpo.