Al día

28 de Mayo, Día Mundial de la Nutrición

El 35% de los cánceres guarda relación con la forma de alimentarnos.

Dietas, superalimentos y ecuación nutricional con la doctora Ana Bellón.

Además de ese 35% de diagnósticos de cáncer asociados a una mala alimentación, la doctora Bellón reparte culpas y asocia los terribles datos del sobrepeso y la obesidad y  así como su proyección futura a lo que comemos y la herencia genética.

Admite la experta nutricionista que la obesidad puede considerarse una enfermedad multigénica, es decir, originada por la combinación de diversos genes, pero tiene muy claro que si existe una herencia nefasta a este respecto es la manera de comer y de alimentarnos.

Hábitos sobre tipo de alimentos, cantidades, combinaciones y horarios que hemos copiado de nuestros mayores y que enseñamos sin querer a nuestros niños. El efecto espejo en la alimentación actúa de forma implacable. Según Ana Bellón, “Se enseña mucho más con el ejemplo que con la teoría y de padres mal comedores y sedentarios hijos con los mismos hábitos y por tanto más probable que sean obesos.”

 Asimismo, la doctora consideraría muy interesante comenzar a instruir, en la línea de lo que ya viene haciendo en las aulas , en los parámetros básicos de una nutrición saludable. Apelando a su propia experiencia considera que los niños son muy receptivos a esta materia y que los resultados se dejarían notar a medio plazo en los datos de obesidad infantil.

Nada más y nada menos que 70 millones de niños en todo el planeta la padecerán en 2015, si no se abandona el consumo de alimentos procesados, azúcares refinados y grasas trans. En España , la estadística nos sitúa en segundo lugar en cuanto a niños gordos, por detrás de Grecia, a pesar de nuestra dieta mediterránea.

Para los adultos con un Índice de Masa Corporal superior a 30, dato con el que la OMS ha tipificado la obesidad, el futuro tampoco se presenta muy halagüeño, pues no sólo se habla de disminuir ese dato, sino de su permanencia y aumento. En 2004, de cuando se disponen las últimas cifras de este organismo, se hablaba ya de 1900 millones de personas obesas en todo el planeta. De esos no pocos millones, 600 sufren obesidad mórbida.

La médico nutricionista, muy conocida por su participación en La Maña de la 1 de RTVE, cree que en nuestro país podemos recurrir a la citada dieta mediterránea como salvavidas : el consumo de frutas y verduras frescas junto con aceite de oliva virgen extra, frutos secos, cereales integrales, legumbres, proteína magra como carne , pescado y huevos.

Por supuesto, en caso de peligro en la báscula, es necesario echar mano de las dietas, pero no de cualquiera, porque “todos los años hay una determinada dieta que alcanza más popularidad pero que les pasa como a la espuma de la ola , que igual que suben , bajan , cuando se ve que no son la panacea, porque para perder peso aún no hemos encontrado la dieta mágica.”

Sí reconoce la eficacia de algunas ya consolidadas, como la Perrricone basada en cinco ingestas diarias de cinco alimentos ricos en proteínas, la pealodieta, que imita la forma de comer de nuestros antepasados del paleolítico, evitando todo lo procesado, congelado y enlatado y, por último, la dieta del método Pronokal, que, siguiendo cinco pasos se basa en la pérdida de peso a expensas de grasa preservando la masa muscular y contribuyendo a eliminar la inflamación del tejido adiposo.

De lo que se trata , asegura , “es dar al organismo alimentos ricos en nutrientes y no aquellos alimentos que sean fuente de calorías pero pobres en nutrientes.”

En estos categoría engloba la directora de Centro Médico Bellón los famosos superalimentos, echando mano de la definición del The Oxford English Dictionary : alimento rico en nutrientes considerado especialmente beneficioso para la salud y el bienestar.

Se han considerado superalimentos a los arándanos, el acai, la granada, la remolacha, el cacao o el salmón.

El problema, aclara la doctora, es que en las investigaciones llevadas a cabo para poder afirmar el beneficio para la salud de estos alimentos se tiende a emplear niveles muy altos de nutrientes que habitualmente no son alcanzables dentro de una dieta normal. La gente los tendría que consumir frecuentemente para obtener de ellos algún beneficio para la salud.

Pero lo que sí se puede afirmar que la inclusión de estos alimentos dentro de nuestra dieta equilibrada nos beneficiará sin duda.

En cuanto a la hidratación, lema en que basa su campaña este 2016 el Día Mundial de la Nutrición, Ana Bellón, sigue las recomendacines  de la AESAN (Agencia Europea de Seguridad Alimentaria), que a su vez estima como necesario el consumo diario de tres litro de líquido.

De esta cantidad un poco menos de la mitad debe provenir de los alimentos ingeridos , sobre todo frutas y verduras. La otra mitad debe ser suplementada con agua u otras bebidas. Ello supone algo menos de ocho vasos de líquidos diarios. Si en el desayuno se toma una taza de leche con café o una infusión, a media mañana un zumo de frutas natural, en cada comida 2 vasos de agua y en la tarde otra infusión ya tendríamos los dos litros diarios..

Directora de http://www.centromedicobellon.com

Licenciada en Medicina y Cirugía por la Universidad Complutense de Madrid, con la especialización e Medicina Familiar y Comunitaria. Postgrado en nutrición, dietética y dietoterapia en la Universidad de Navarra y el postgrado de homeopatía en el Hospital Homeopático de San José en Madrid.

Colaboradora en el programa de Televisión Española; “La Mañana”, como experta nutricionista.